La industria de restaurantes enfrenta una situación critica ante el encarecimiento de sus insumos, el aumento de la competencia y el menor empleo en la región. (Fotografía de Fernando Compeán)
La industria restaurantera se encuentra ante una encrucijada que les impide incrementar el precio a los platillos.
La industria de restaurante se encuentra en una encrucijada: las ventas se han caído entre un 20 a un 25 por ciento y los costos de operación han aumentado en 20 por ciento en promedio, pero no pueden repercutir los incrementos en el consumidor final por el temor de salirse de mercado.
Al igual que otras ramas productivas relacionadas al ramo de alimentos, la industria de restaurantes se declaró imposibilitada en ajustar sus precios de venta al público, ya que el consumo por persona en los negocios afiliados ha disminuido también en un 20 por ciento, no así la afluencia de comensales. El crecimiento de negocios de ambulantes en alimentos ha crecido fuertemente ante la falta de nuevas inversiones y el aumento del desempleo.
Entrevistado en su negocio, Armando Álvarez de los Santos, presidente de la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac) delegación Laguna, declaró que de acuerdo a una plática sostenida el pasado lunes con sus socios, se hizo un consenso de que sus materias primas se han encarecido en 20 por ciento, principalmente productos como la carne roja, harina y aceite. De igual manera, algunas verduras tienen un comportamiento de altibajos durante todo el año, como lo es el aguacate y el tomate.
Aún cuando a cada negocio le pega de manera diferente esta caída en ventas, el comentario generalizado es que a los socios les ha bajado el consumo entre un 20 a un 25 por ciento en lo que va de 2008.
A decir de Álvarez la caída en ventas muestra un comportamiento atípico para un primer cuatrimestre del año, sin embargo, confía en que mayo se logre un repunte en ventas por las festividades que hay en el mes.
Para él es claro que la llegada de un menor número de nuevas empresas a la región ha generado un menor empleo, por lo que muchas personas optan en poner un puesto de comida para combatir el desempleo, generando un aumento del ambulantaje. “Esto nos pega a los restaurantes establecidos”, los cuales se estiman en 220 afiliados, pero se estima que operan en la región alrededor de mil 500 negocios, generando cerca de 10 mil empleos.
Ante los aumentos en los precios de los insumos y en los costos de operación de los restaurantes, los empresarios del ramo no han tomado la decisión de repercutir las alzas en los precios del consumidor final, por lo que dijo el presidente de Canirac que “vamos a aguantar los precios hasta donde podamos”, por lo que será decisión de cada establecimiento ajustar o no sus precios a la carta.
Señaló que no se puede asegurar que los pequeños negocios son los afectados por el encarecimiento de insumos, ya que existen franquicias o negocios de mayor tamaño que tienen como política manejar cierto margen de ganancia, y en caso de no obtenerlo, deben ajustar sus tarifas.
Cierran 15 negocios
Al primer cuatrimestre del año, Canirac reportó el cierre de más de 15 negocios que operan en la Comarca Lagunera, los cuales van desde franquicias hasta negocios regionales.
Las condiciones del mercado regional han provocado que muchos negocios no soporten el absorber los altos costos de producción, pero sobre todo hacer frente al crecimiento de los ambulantes, ya que al quedar desempleadas muchas personas su primera opción, dijo Álvarez, es poner un puesto de alimentos.
Consciente que la industria no es de primer necesidad, sino es un prestador de servicio, aseguró que Monterrey y otras ciudades grandes a nivel nacional no han resentido esta disminución en ventas en esta proporción, por lo que enfatizó que “los restauranteros de otras ciudades no están batallando tanto como en La Laguna”.
El hecho que la ciudad permita aún ir a comer a la casa y que hay una tendencia marcada por acudir sólo a los restaurantes los fines de semana, ha provocado que los empresarios del ramo enfrenten una situación crítica.
El presidente de Canirac indicó que ahora se han conjugado un sin- número de factores que afectan esta industria, como lo son: el alza en insumos, la baja en inversiones nuevas, el mayor desempleo, el aumento en la inseguridad, la Ley Antitabaco y la recesión económica de Estados Unidos. “Ahorita nos están pegando por todos lados. “Yo en mi negocio voy a aguantar hasta donde aguante”.
Ante este escenario poco favorable, Álvarez dijo convencido que el único camino que tienen es mejor la atención en el servicio y en la administración del negocio, implementando mejores estrategias de mercado para disminuir los costos de operación.
El menú
La industria restaurantera muestra malos números en los primeros
cuatro meses del año:
- Las ventas han caído entre 20 y 25 por ciento.
- Los costos de operación han aumentado 20 por ciento.
- Incremento de la venta de comida informal.
- En los primeros cuatro meses del año han cerrado 15 negocios
- Incertidumbre por la nueva Ley Antitabaco.