La mexicana Norma Schwarzblatt Rabinovich, muerta en el atentado de Bombay, será enterrada en Israel bajo la polémica de si debe ser incluida en el funeral oficial y sus deudos recibir compensaciones, aunque no fuera ciudadana israelí.
La opinión pública instó a las autoridades a que le concedan la nacionalidad israelí a título póstumo, para cumplir así el sueño de quien antes de morir había cumplimentado el proceso y rellenado los formularios para emigrar a Israel.
“Será declarada inmigrante”, aseguró ayer Zeev Bielski, presidente de la Agencia Judía, organización que se dedica a alentar la emigración de judíos a Israel, aunque la legislación nacional no la reconozca como tal por no haber firmado el documento de nacionalidad en el Ministerio del Interior.
Schwarzblatt, de 50 años y divorciada, llenó los formularios de emigración a Israel en la India, país que visitaba antes de reunirse en este país con dos de sus tres hijos: Manolo, de 18 años y estudiante de una escuela religiosa, y Jean, de 24 y estudiante de la Universidad de Tel Aviv.
El primero llegó a Israel hace sólo unos meses y la segunda hace cuatro años. En México quedó una tercera hija, Orli, de 21 años, que vive con el padre.
Según Bielski, Schwarzblatt murió como judía en un atentado a un centro judío, de la organización religiosa Jabad, y dado que había solicitado la emigración, no debe ser separada de las otros ocho víctimas hebreas.
Los restos de todas ellas llegaron ayer a Israel en un avión fletado por la Fuerza Aérea israelí, y por la hoy mañana se les ofrecerá un funeral de Estado con las más altas autoridades del país.
La mexicana será enterrada después en el principal cementerio de Jerusalén a mediodía, tras pagar la Agencia Judía varios miles de dólares por los gastos del funeral y de la parcela, que en teoría le correspondería al Seguro Nacional, si hubiera sido israelí.
El portavoz del Seguro, Haim Pitusi, manifestó que ellos no pueden hacerse cargo de la mexicana, porque no se lo permite la Ley, pero aseguraron que buscan resquicios para que los dos hijos israelíes de la mujer reciban los mismos beneficios que los demás deudos.
Pitusi aseguró que en los próximos días, con la ayuda de la Agencia Judía y otras instituciones de Gobierno, se verificarán todas las posibilidades para concederle las ayudas previstas en estos casos a sus herederos o que otros fondos públicos lo hagan.
