La senadora Rosario Ibarra de Piedra felicita al periodista Miguel Ángel Granados Chapa, quien recibió la medalla Belisario Domínguez 2008 en sesión solemne del Senado de la República. (El Universal)
Ve el columnista aumento de tendencias autoritarias en México.
En una sesión solemne del Senado de la República, el presidente Felipe Calderón entregó la medalla Belisario Domínguez 2008 al periodista y colaborador de El Siglo de Torreón, Miguel Ángel Granados Chapa, ante la presencia de senadores del PRD.
El presidente de la Cámara Alta, Gustavo Madero, fue el encargado de entregar el reconocimiento y de colocar la medalla en el cuello de Granados Chapa, luego de dirigir la ceremonia, que inició con el Himno Nacional Mexicano.
Granados Chapa afirmó ante el Senado de la República que las tendencias al autoritarismo crecen en México.
En presencia del presidente defendió el derecho a la movilización en torno a la reforma petrolera como un mecanismo para lograr en el Poder Legislativo la reforma petrolera que requiere el país.
“La labor legislativa se alimenta con la movilización de los ciudadanos, que ya se pronunciaron en general en las urnas, pero pueden y quieren expresarse también en la calle, en los caminos, en torno a asuntos puntuales, en procura de solución a sus problemas para acuciar legítimamente a sus legítimos representantes”, expresó.
A la movilización ciudadana, apuntó, hemos de reconocer y valorar sus cualidades motrices.
Añadió que la calidad del proceso legislativo en curso sería otra de no haberlo precedido el amplio debate nacional sobre un tema que como pocos no puede ser abordado sin la presencia de la sociedad.
“Hoy, juntos, legisladores y la gente digan lo que hay que hacer para poner al día y en estricto apego a la Constitución la industria petrolera nacional”, expresó Granados Chapa.
Sin embargo, “esas libertades públicas requieren un fortalecimiento que impida retrocesos para la convivencia nacional. Nunca eliminados por entero, como inexplicable hierba envenenada, crecen tendencias al autoritarismo, a la criminalización de la protesta social, a la guerra sucia no enderezada sólo contra los opositores al régimen sino contra ciudadanos en reclamo de sus derechos”, apuntó.
Las protestas
Antes que iniciara la sesión, al entrar al recinto el jefe del Ejecutivo una mujer gritó: “¡Es un honor estar con Obrador!”.
Se llama Andrea Fernández, trabaja en Radio Educación, pero le gusta que le digan “Dorotea Arango”. Nadie la molestó, ahí permaneció. Poco después, cuando se entonó el Himno Nacional, Rosario Ibarra levantó el puño izquierdo. En su lugar colocó una fotografía de Andrés Manuel López Obrador con la leyenda: “Presidente legítimo”.
Si bien estuvo presente la mayoría de los senadores del Partido de la Revolución Democrática (PRD), fue notoria la ausencia del vicecoordinador de la bancada, Ricardo Monreal, y de Pablo Gómez Álvarez.
Leen sus textos desde jóvenes
Al pie de la estatua de Belisario Domínguez, el presidente Felipe Calderón platicó con el periodista Miguel Ángel Granados Chapa, de cuyo cuello colgaba la medalla del prócer chiapaneco.
Calderón, de acuerdo con la versión del autor de la Plaza Pública, le hizo notar que él y su esposa leían sus textos desde que eran jóvenes.
“Él y su esposa, a quienes conocí siendo muy jóvenes, cuando eran militantes de base del PAN, leían mis textos, y estaban de acuerdo conmigo”, narró Granados Chapa.
Minutos antes, durante la develación del nombre del columnista, Calderón atestiguó una broma que deslizó el senador priista Manlio Fabio Beltrones.
“El que se mueve no sale en la foto”, dijo el sonorense, y el galardonado recordó a botepronto que el nombre del autor de esa frase de la picaresca mexicana, el dirigente cetemista Fidel Velázquez, estaba en esa columna.
“Eso lo dijo uno de los que han sido galardonados”, apuntó el periodista hidalguense.
