La iniciativa privada no está de acuerdo en las tarifas de la electricidad, ya que afirman esto les resta competitividad.
La paraestatal sostiene que sus tarifas sí son competitivas
El Siglo de Durango
La energía eléctrica es de los principales insumos que tienen los empresarios pero también una de sus principales quejas ante el costo del servicio.
El Centro Empresarial Durango (Coparmex) en voz de su dirigente, Francisco Quiñones Gallegos, asegura que muchos consorcios que consumen grandes cantidades de energía eléctrica han dejado de crecer porque analizan irse a Centroamérica, donde las tarifas son más baratas.
Por su parte Sotero Soto Mejorado, ex presidente de la Cámara Nacional de la Industria y la Transformación (Canacintra) en Durango, platica que la tendencia es buscar energías alternas como podría ser la solar. El empresario asegura que las actuales tarifas de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), México no son competitivas.
Héctor Sáenz Méndez, superintendente de la CFE en Durango, sostiene que la tarifa eléctrica en México es mucho más barata que en ciertos estados del vecino país del norte. “Estamos por arriba en precio de otras empresas como lo son las francesas pero mientras dependamos de una generación derivada del petróleo, los costos de generación de electricidad dependen de la fluctuación del precio del crudo”, explica.
ANÁLISIS
“Los precios de la energía merman en un 30 por ciento las utilidades de varias empresas, por eso, aquellos políticos que se amparan con que la energía es soberanía nacional, están en un error. México lo que necesita es que si no tiene el Gobierno para invertir en más excavaciones petroleras, entonces que entre la iniciativa privada”, considera Quiñones Gallegos, presidente de la Coparmex.
Soto Mejorado indica que cualquier proceso de energía eléctrica alterna puede resultar mucho más barato para los empresarios que lo que se paga en la CFE. No obstante, el problema es que para implementar los sistemas se requiere una cuantiosa inversión.
Por eso, cavila, se deben generar los programas de apoyo para las pequeñas y medianas empresas. Además, existe la posibilidad de acceder a recursos por parte del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt).
DEFENSA
Sáenz Méndez argumenta que las actuales tarifas no son un factor para que las empresas disminuyan su producción o sus utilidades.
“Tenemos que estar conscientes de que los tiempos son diferentes. Ya no es lo mismo que hace 15 años, que no podemos seguir trabajando en el mismo esquema tanto de estructura de recurso humano como equipo y maquinaria de hace muchos años, tenemos que buscar ingeniería de punta, equipos que ahorran energía, controladores de demanda, desde luego, ingeniería actual”, piensa.
El funcionario federal subraya que no se puede olvidar que la CFE es una empresa de servicio y por lo tanto, no sólo se enfoca en los negocios. “Claro que tenemos que trabajar con números negros, ser productivos, eficientes pero no olvidamos que somos una empresa de servicio”, reflexiona.