La denuncia de la ciudadanía para mantener en orden sus zonas de residencia es la manera que más ha derivado en detenciones por alteración del orden.
El Siglo de Durango
Rogelio Caldera Ríos, Óscar Leonel Sanrtillán y Eleazar Ibarra Trujillo fueron reportados a la Policía Municipal por los vecinos de la colonia 8 de Septiembre, pues a medianoche no los dejaban descansar por estar escandalizando en la vía pública; incluso, iban a golpear las puertas de las casas aledañas para fastidiar.
La respuesta por parte de las autoridades no se hizo esperar, por lo que la unidad P-024 se trasladó hasta la calle Mártires de Chicago para someter a los escandalosos. Rogelio, de 40 años de edad, es obrero y tiene su domicilio en la colonia Azteca, mismo oficio de Leonel, de 26 años de edad, quien habita en la colonia Asentamientos Humanos; mientras que Eleazar, de 20 años de edad, trabaja como cocinero de un restaurante y dice vivir en la colonia Benigno Montoya.
EBRIOS
Al momento de ser revisados por el servicio de enfermería para ser remitidos, se detectó que Rogelio Caldera Ríos presentaba rasgos de una hemorragia nasal, raspones en el mentón y moretones en la región frontal y en los pómulos; lo curioso es que sus compañeros de parranda ingresaron sin lesiones.
El servicio médico informó además que los tres llegaron con aliento alcohólico, Rogelio en segundo grado de ebriedad, por lo que la detención se concretó a la alteración del orden que reportaron los vecinos de la colonia 8 de Septiembre.
