Dos artefactos de escasa potencia cuya colocación fue anunciada por alguien que dijo llamar en nombre de la banda terrorista ETA explotaron ayer en dos lugares distintos en la provincia de Málaga, sin causar heridos ni daños materiales de consideración.
Un tercer artefacto fue desactivado por expertos de la Policía en una carretera de esa misma provincia del Sur de España, sin generar mayores consecuencias, según dijo a los periodistas el delegado del Gobierno en Andalucía, Juan José López Garzón.
Agregó que los explosivos eran de “pequeña entidad” y que no han causado daños personales, tan sólo algunos de carácter material que carecen de importancia.
Poco antes de mediodía la Guardia Civil de la localidad de Benalmádena recibió una llamada de un comunicante que, en nombre de ETA, avisaba de la colocación de los artefactos en una playa de Málaga, el puerto deportivo de Benalmádena y en un punto de la carretera que une Málaga y Torremolinos.
Hacía las 13.00 horas el primer artefacto hacía explosión en una playa de la ciudad de Málaga, cerca de un hotel. La playa había sido desalojada con antelación, pero no así el hotel, aunque en ningún caso hubo heridos.
Dos horas más tarde tuvo lugar la segunda explosión en las inmediaciones del Puerto Deportivo de Benalmádena, que también había sido desalojado, así como las playas cercanas. Localizada a media tarde, la tercer bomba fue desactivada por expertos de la Policía sin que hubiera daños personales o materiales.
