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Estos ‘niñitos’ son mi razón de vivir: Ingrid

COMPROMISO | BETANCOURT Y SUS HIJOS MANTENDRÁN CAMPAÑA POR LA LIBERACIÓN DE REHENES

La ex candidata presidencial colombo-francesa, Ingrid Betancourt (centro), sonríe con sus hijos Mélanie y Lorenzo Delloye, tras la llegada del avión que los trasladó desde París hasta la base militar de Catam en Bogotá (Colombia). (AP)

La ex candidata presidencial colombo-francesa, Ingrid Betancourt (centro), sonríe con sus hijos Mélanie y Lorenzo Delloye, tras la llegada del avión que los trasladó desde París hasta la base militar de Catam en Bogotá (Colombia). (AP)

Agencias

Pide la ex rehén de las FARC a Chávez y Correa acercarse a Álvaro Uribe.

La rescatada ex candidata presidencial colombiana Ingrid Betancourt dejó fluir ayer con libertad su corazón de madre al reencontrarse con sus dos hijos “muy bellos” y dijo que ambos fueron la razón para mantenerse con vida.

Mélanie y Lorenzo llegaron ayer a la base militar de Catam, en Bogotá, a bordo de un avión de la República Francesa desde París junto a su hermana Astrid y a su ex marido Fabrice Delloye, acompañados de una comitiva gala encabezada por el canciller Bernard Kouchner.

Minutos después del aterrizaje, una incontenible Ingrid Betancourt avanzó hacia la escalinata del avión, sin esperar que se abriera la puerta de la aeronave, y segundos después se fundió en un abrazo con sus dos hijos.

La ex candidata presidencial fue rescatada la víspera por un comando militar, en una operación para engañar a los custodios de las FARC que mantenían retenida a la ex candidata desde febrero de 2002.

Junto a Betancourt fueron liberados 11 militares y policías y tres ciudadanos estadounidenses que formaban parte de un grupo que las FARC pretenden canjear por guerrilleros presos.

“Tengo una dicha infinita de tener a mis hijos junto a mí”, dijo la dirigente política que dejó salir su instinto maternal y dijo que Melanie, de 22 años, estaba bien vestida, con un cinturón que le tejió en cautiverio, y señaló que se sentía feliz de verla con “un cuerpo de mujer bellísimo”.

De Lorenzo, de 19 años, dijo que lo vio un poco “deshilachado” (mal vestido), pero “por lo que me dijo está a la moda”, tras lo cual aseveró que está “muy bello”.

“Estos son mis niñitos, mi orgullo, mi razón de vivir, mi luz, mi luna y mis estrellas, por ellos mantuve las ganas de vivir y de salir de esa selva”, dijo.

Tras besarlos incansablemente, Betancourt dijo que esperaba poder estar el máximo de tiempo con sus hijos para “sentirlos, tocarlos, tan diferentes, tan bellos”.

Agregó que está “orgullosa de ellos porque crecieron solitos y dieron una batalla bellísima. La última vez que yo vi a mis hijos, Lorenzo era un chiquito y ahora quiero acurrucarme en la cama con él, espero que la novia no se ponga celosa”, dijo entre risas.

Mélanie aseguró por su parte, que siempre tuvieron miedo de un operativo a sangre y fuego, pero éste fue un operativo de Inteligencia “que es bien diferente”.

Los dos jóvenes, al igual que su madre, se comprometieron en mantener una campaña por la liberación de todos los secuestrados en poder de la guerrilla y dijeron estar dispuestos a participar en una marcha nacional que se llevará a cabo el próximo 20 de julio.

FUTURO POR DEFINIR

“Esta libertad me llega de golpe y estoy todavía bajo la anestesia del shock”, dijo la ex rehén al ser preguntada sobre sus planes a futuro.

“No sé qué haré en el futuro. Me había programado para cuatro años más en la selva”, donde recibió un trato que “no era para un ser humano” ni para “un animal”, explicó.

Preguntada sobre si se instalará en Francia o en Colombia, indicó que “lo ideal” sería tener “el don de la ubicuidad, poder estar en Francia y en Colombia”, antes de reconocer que “no es posible”.

“No sé qué haré. ¿Me quedaré en Colombia? Quizás. Iré a Francia seguramente también a menudo”, señaló.

A preguntas sobre si la energía de que hace gala, pese al calvario sufrido, la llevará a volver a tener un papel público de primer plano, dijo que su compromiso personal de luchar por la liberación de los rehenes que siguen en la selva es “absoluto”, aunque no sabe “cómo hacerlo”.

LLAMADO A LA UNIÓN

Betancourt realizó ayer un llamado a los presidentes de Ecuador, Rafael Correa, y de Venezuela, Hugo Chávez, a reconstruir los vínculos de confianza con Colombia.

“Quiero hacer un llamado a Correa y Chávez para que se puedan volver a crear vínculos de confianza con el presidente (colombiano Álvaro) Uribe (Vélez)”, dijo Betancourt.

Agregó que espera fortalecer las relaciones con los países vecinos a Colombia para poder trabajar “por la liberación de todos los demás secuestrados”.

Las relaciones entre Ecuador, Venezuela y Colombia se deterioraron luego del ataque militar colombiano a territorio ecuatoriano, en marzo pasado, donde murió el líder guerrillero “Raúl Reyes” y otras 25 personas.

Extraditarán a EU a rebeldes detenidos

El Gobierno de Colombia espera que los dos guerrilleros capturados durante el rescate de 15 rehenes en poder de las FARC sean extraditados a Estados Unidos, afirmó ayer el jefe del Ejército, general Mario Montoya.

“Que los extraditen, que paguen sus penas y que se pudran en la cárcel”, declaró Montoya en rueda de prensa ayer, en la que mostró ante las cámaras a los rebeldes capturados en el operativo de Inteligencia.

Medios locales informaron que el Gobierno de Estados Unidos estudia la posibilidad de pedir en extradición a los guerrilleros Gerardo Antonio Aguilar, alias “César”, y Alexander Farfar, “Gafas”, por el secuestro de tres ciudadanos de ese país.

Los estadounidenses Thomas Howes, Keith Stansell y Marc Gonsalves fueron rescatados la víspera junto a la ex candidata presidencial colombiana Ingrid Betancourt y 11 militares en poder de las FARC.

‘2 mil 321 días en cautiverio’

Desde hace meses, el rostro de Ingrid Betancourt se desplaza a lo largo de los edificios de los ayuntamientos de Francia. El último había llegado al Monte Blanco, apenas en junio pasado. En la antigua construcción que alberga al Gobierno socialista de París, decorada desde el primer día de julio por las banderas de Francia y la Unión Europea, se encuentra una fotografía gigante que tiene en la parte superior un contador que se detuvo el miércoles por la noche. Marca cuatro números rojos: 2321. Esa cifra representa el número de días que la franco-colombiana estuvo retenida en la selva amazónica colombiana. Las letras rojas mayúsculas anuncian: LIBRE. Hoy se espera que al medio día, la ex candidata presidencial al Gobierno de Colombia, pise el territorio francés donde ya se habla de someterla a una revisión médica y alejarla de la presión mediática.

Los medios parisinos y algunos extranjeros se mantienen a la expectativa de la llegada de la franco-colombiana. Llegará hoy en el mismo avión dispuesto por el Gobierno de Nicolas Sarkozy que el jueves hacia las dos de la mañana de alejaba del aeropuerto militar de Villacoublay, cercano a París, y que trasportaba a los hijos de Betancourt, Mélanie y Lorenzo, a su hermana Astrid y a su ex marido Fabrice Delloye.

“Durante años, no pude pensar en los niños, porque el dolor de la muerte de papá absorbía toda mi capacidad de resistencia. Cuando pensaba en ellos, tenía la impresión de ahogarme, ya no podía más respirar. Entonces yo le decía: ‘Fab está ahí, él vigila todo, no hay que pensar, no hay que pensar”, es Ingrid, en su última prueba de supervivencia.

Era ella en aquella carta de 12 páginas que el 30 de noviembre de 2007, días después de que el presidente Álvaro Uribe diera por terminada la gestión de su homólogo venezolano Hugo Chávez y de la senadora colombiana Piedad Córdoba para lograr el acuerdo humanitario con las FARC, llegaba a manos de su madre, la ex senadora Yolanda Pulecio.

Entonces, el Gobierno de Uribe anunciaba que en algún punto de las calles de Bogotá se había incautado a miembros del movimiento guerrillero las más recientes pruebas de supervivencia de la ex candidata presidencial por el Partido Oxígeno Verde: un video, que según el Gobierno colombiano fue grabado el 24 de octubre, en el que se ve a Ingrid demacrada y cabizbaja.

Ella estaba allí viva aunque sin ganas de nada, cansada de sufrir. Porque como ella misma decía, no es ni tan valiente, ni tan fuerte, ni tan inteligente, es un ser humano que pide auxilio. Ahora está de regreso con los suyos tras más de seis años de ausencia. (Por Socorro Ruelas)

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Escrito en: FARC Ingrid Betancourt

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