La actriz iniciará la construcción de un teatro en el DF. (El Universal)
Enfrente está el metro Mixcoac y por aquí -explica Silvia Pinal al extender su brazo derecho- pasa la calle Cellini; por acá -y pone el otro brazo de manera paralela- está la calle Andrea del Sarto”.
El espacio que hay entre sus brazos será el nuevo Teatro “Silvia Pinal”. En la calle Cellini (que es muy amplia) se ubicará la entrada principal mientras que el estacionamiento será por la vialidad llamada Sarto: “Tengo este terreno desde antes de que tuviera el antiguo teatro Silvia Pinal; ya estoy en tratos para tramitar los permisos y dar los primeros pasos”.
La actriz actualmente ofrece temporada de Adorables Enemigas en el Teatro Diego Rivera, que también es de su propiedad. “Siempre he querido ver un teatro con mi nombre pero jamás le cambiaría el nombre a éste, porque aunque es mío, le puse Diego Rivera en homenaje a un artista al que admiré mucho”.
Sin falsas modestias y, en cambio, con un tono divertido, completa la idea con una frase que pocas actrices se permitirían: “A mí me gusta ver mi nombre en las marquesinas... y entre más grande mejor”.
Ella espera que el año 2009 lo vea en la marquesina de este nuevo foro que llenaría el hueco que dejó el viejo Teatro Silvia Pinal de la colonia Roma, convertido ahora en centro religioso que promete no más sufrimientos.
Sin embargo, la actriz anda con tiento por la crisis económica: “Tengo que hacer muy bien las cuentas. ¡No me vaya a salir mal el negocio y tenga que suspender la construcción! Espero reunir las suficientes garantías económicas para terminarlo el próximo año”.