La banda terrorista ETA hizo explotar ayer un coche-bomba frente al cuartel de la Guardia Civil de Calahorra (La Rioja, Norte de España), que hirió a un agente y causó conmoción en una localidad que celebraba la procesión del Viernes Santo.
El agente sufrió heridas leves en el cuello al tirarse al suelo durante la explosión, que se produjo a las 14:00 hora local, media hora después de que un comunicante en nombre de ETA advirtiera del atentado a una asociación de ayuda en carretera.
Inmediatamente se acordonó la zona en un perímetro de 300 metros y comenzó el desalojo del cuartel, situado en el Centro de Calahorra, una población de 27 mil habitantes, que ya fue testigo de un atentado en el mismo lugar perpetrado por ETA en 1983.
La explosión causó más daños en los edificios colindantes que en el propio cuartel, informó el alcalde de Calahorra, Javier Pagola.
En torno a la zona acordonada se agolparon centenares de personas y pudieron verse escenas de pánico entre los ciudadanos que estaban cerca tras asistir a una procesión de Semana Santa. El vehículo utilizado había sido robado a una pareja, a la que la Policía encontró atada a un árbol en la provincia vasca de Álava, a unos cien kilómetros de distancia de Calahorra.
El Gobierno regional de la Rioja y el Ayuntamiento estudiaron la posibilidad de realojo de los vecinos de los edificios más afectados ante la posibilidad de que no puedan volver a sus hogares.
Fuentes gubernamentales informaron de que el jefe del Ejecutivo José Luis Rodríguez Zapatero, contactó con el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, para seguir las noticias del atentado desde el Parque de Doñana (sur), donde pasa las vacaciones con su familia.
Se trata del primer atentado de ETA, organización terrorista que ha asesinado a más de 850 personas desde 1968 para conseguir que el País Vasco sea un Estado independiente y socialista, desde el asesinato a tiros el pasado día 7 del ex concejal socialista de la localidad vasca de Mondragón Isaías Carrasco.
Carrasco fue la primera víctima mortal de ETA en 2008 y la quinta desde que la organización terrorista rompió el alto el fuego con el atentado en la terminal 4 del aeropuerto de Madrid-Barajas el 30 de diciembre de 2006.
En ese atentado perdieron la vida dos ecuatorianos y resultaron heridas otras 19 personas, mientras que a finales de 2007, el 1 de diciembre, dos guardias civiles españoles fueron asesinados a tiros en Capbreton (Francia) cuando realizaban tareas de vigilancia de presuntos etarras en el vecino país.
ETA cometió su primer atentado de 2008 el 8 de febrero, cuando hizo estallar una bomba en los juzgados de la localidad de Vergara, también en el País Vasco.
