Policías federales resguardan una de las entradas al Mercado de Abastos mientras clientes y empleados salen del lugar.
Policía Federal ordena desalojo a pesar de que el Municipio ya había revisado el lugar.
Policías federales del operativo Conjunto Laguna crearon el caos con la evacuación de más de dos mil personas del Mercado de Abastos atendiendo a una llamada falsa sobre una bomba en el lugar, casi una hora después de que personal de Protección Civil de Torreón ya había revisado el mercado y desestimado la amenaza.
Esta es la segunda ocasión que agentes federales no se coordinan con las autoridades locales de Protección Civil y evacuan un lugar masivo de personas ante el reporte de una amenaza de bomba, sin atender los protocolos y que resulta falsa. Anteriormente desalojaron a casi mil estudiantes de un centro educativo en Valle Oriente hace dos meses.
Nelson Lozada Ramírez, titular de Protección Civil de Torreón, calificó de desfasada la acción de los policías federales que sin atender el protocolo en los casos de amenazas de bomba, iniciaron una evacuación de comerciantes y clientes, alentando el pánico y fomentando futuras llamadas similares debido al “éxito” obtenido por parte del bromista.
Desde las 11:30 horas se recibió la llamada en el Servicio de Emergencias 066 y Lozada Ramírez la escuchó y por la forma de expresión del sujeto, se desestimó de entrada el reporte por inconsistente, pero atendiendo al protocolo se envió una patrulla de Seguridad Pública al Mercado de Abastos para realizar un recorrido.
Casi 45 minutos después llegaron los agentes de las fuerzas federales de apoyo de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) y empezaron a evacuar a toda la gente, tanto clientes como empleados y comerciantes que se oponían a la medida que dicen los afectó económicamente durante las casi tres horas que duró el “show” como fue calificado por uno de los afectados.
Los agentes federales empezaron a revisar los locales comerciales y vehículos estacionados dentro y fuera de la central de abastos, con resultados negativos. La medida de los federales molestó a los ciudadanos que habían terminado sus compras y no se les permitió retirarse en sus vehículos hasta que terminara la revisión.
Lozada Ramírez insistió en que debe existir coordinación con la Policía Federal, ya que en el remoto caso de que se encontrara un indicio sobre la presencia de un artefacto explosivo, se alerta de inmediato al Ejército Mexicano que sí tiene el equipo y la preparación para atender este tipo de emergencias.
Uno de los comerciantes molestos calificó de absurdo el argumento de un policía federal que dijo que la evacuación era para prevenir una situación similar como la ocurrida en Morelia el pasado 15 de septiembre. Nelson Lozada aclaró que los hechos de Morelia se derivaron de una granada que accionó una persona y no por la explosión de un artefacto de fabricación casera similar a una bomba.
