La Casa Blanca informó hoy que 'evaluará' el fallo de la Corte Internacional de Justicia (CIJ) que pide al gobierno de Estados Unidos detener la ejecución de cinco ciudadanos mexicanos condenados a muerte en Texas.
'Vamos a evaluarlo', dijo la vocera de la Casa Blanca, Dana Perino, quien no dio mayores comentarios.
La CIJ dio a conocer su fallo sobre las "medidas provisionales" solicitadas por México en junio pasado para evitar la ejecución de los mexicanos, entre ellos la de José Ernesto Medellín, que está programada para el próximo 5 de agosto.
La CIJ ya había emitido en 2004 un fallo en el que ordenó a Estados Unidos la revisión de 51 casos de mexicanos en pena de muerte, al determinar que en su detención se habían violado sus derechos a la asistencia consular bajo la Convención de Viena de 1963.
La Suprema Corte de Justicia de Estados Unidos dictaminó en marzo de este año que el presidente George W. Bush no puede obligar al estado de Texas a revisar los procesos de mexicanos condenados a muerte.
La analista sobre México de la organización de derechos humanos Human Rights Watch, Tamara Taraciuk, dijo que 'Estados Unidos ni ningún otro país pueden invocar el derecho interno para no cumplir con sus obligaciones internacionales'.
Señaló que 'el propio Estados Unidos reconoce que si algunos de los mexicanos mencionados en el pedido de medidas cautelares fuera ejecutado sin la adecuada revisión y reconsideración, esto constituiría una violación del derecho internacional'.
Agregó que el fallo de la CIJ 'es una medida provisional' que tiene como fin asegurar que la decisión final del tribunal internacional cuando interprete su sentencia 'tenga algún sentido en la práctica'.
La analista dijo que el gobierno de Estados Unidos va a ser responsable del derecho internacional sino se cumplen esas medidas.
'Cómo lo hace, es una decisión interna, pero es claro que la corte les está diciendo que deben hacerlo', recalcó.
