En un intento por evitar el fracaso de un plan que ha sido condicionado por el Senado, George Bush instó al Congreso a anular condiciones irrazonables.
El presidente, George Bush, urgió hoy al Congreso a desechar "condiciones irrazonables" de la Iniciativa Mérida para evitar el fracaso de un plan que pretende ayudar a México en su lucha
contra los cárteles de la droga y "proteger a todo el hemisferio" de la amenaza "de los narcotraficantes y de los terroristas".
"Le pido al Congreso que apruebe esto de manera rápida en el paquete suplementario (de fondos para la guerra en Irak) y sin poner condiciones irrazonables", dijo Bush en un intento por evitar el
fracaso de una Iniciativa que ha sido condicionada por el Senado a la vigilancia estricta de los derechos humanos y al inicio de reformas legales y judiciales.
Las palabras de Bush, en el marco de una ceremonia realizada en el Instituto estadounidense por la Paz, forman parte de una nueva ofensiva para evitar que la ayuda condicionada en la Iniciativa Mérida se convierta en pretexto para certificar los esfuerzos de México en su lucha contra los carteles de la droga y de continuas fricciones entre el gobierno de México y el Congreso de Estados Unidos.
La Iniciativa Mérida ha sido objeto hoy asimismo de una nueva audiencia en la Cámara de Representantes, durante la cual la representante por California, la demócrata, Loreta Sánchez la
consideró como una herramienta útil para combatir a los carteles de la droga y el crimen organizado.