Rafael Ochoa Guzmán. (Archivo)
Reclama sindicato compensación extra por la nueva fórmula para calcular impuesto.
El Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) quiere que el Gobierno Federal le subsidie el Impuesto Sobre la Renta a más de un millón de maestros.
La demanda fue incluida en su Pliego General de Demandas 2008, en el cual el sindicato califica como un retroceso la nueva fórmula para calcular ese gravamen, por lo que exige una compensación.
“Este aumento del Impuesto Sobre la Renta pulveriza cualquier incremento salarial que el trabajador pudiera obtener en el presente año.
“Por tal motivo demandamos que la Secretaría de Educación Pública adopte a partir del mes de enero del presente año, medidas emergentes para resarcir de manera compensatoria el aumento del gravamen en el ISR (a los trabajadores de la educación)”, dice el documento.
“Que se establezca una compensación que permita resarcir el impacto que tiene la nueva base de cálculo del Impuesto Sobre la Renta en el salario de los trabajadores, toda vez que significa un retroceso y, en algunos casos, un grave deterioro en las percepciones de nuestros agremiados”, establece el SNTE en el punto 3.1.4.20 de su pliego petitorio.
El sindicato que encabeza Elba Esther Gordillo no especifica la manera en que se aplicaría ni el monto de dicha compensación.
Sin embargo, si la SEP asumiera el pago del total del ISR de los 563 mil maestros de preescolar y primaria, tendría que erogar 514 millones de pesos cada mes. Es decir, un gasto anual de 4 mil 754 millones 234 mil pesos.
Eso, claro, sin contar todavía el subsidio a maestros de secundaria, el cual sería calculado con base en el número de horas por las cuales estén contratados.
Bajo este esquema, el subsidio representaría incrementos efectivos en los salarios de 7.9 por ciento, en el caso de las remuneraciones más bajas hasta 15.8 por ciento en el caso de quienes tienen los salarios más altos.
La nueva fórmula para calcular el ISR fue parte de la reforma fiscal que el año pasado aprobaron, entre otros, los legisladores de Nueva Alianza... el partido de Elba Esther Gordillo, la presidenta del SNTE.
De forma paralela, la dirigencia pide crear un grupo mixto de trabajo que analice los casos en los que se deteriora, en términos reales, el salario de los docentes, trabajadores administrativos y de apoyo de educación básica, media superior y superior que están afiliados al SNTE.
Ya desde el año 2003, el SNTE logró que la SEP pagara el ISR de las prestaciones de Prima Vacacional, Aguinaldo o Gratificación de Fin de Año de los trabajadores de la educación.
En relación al aumento salarial la dirigencia sindical no fija un porcentaje de incremento, en cambio sí solicita culminar con el proceso de rezonificación.
“(Demandamos) el cumplimiento al acuerdo establecido entre el titular de la SEP y la presidencia del Comité Ejecutivo Nacional del SNTE en 2006, referente al proceso de rezonificación”, señala su pliego petitorio.
Prevén salida de Rafael Ochoa
Con 12 secciones en conflicto, el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) emprenderá la reorganización del Comité Ejecutivo Nacional. Se prevé que el secretario general ejecutivo, Rafael Ochoa Guzmán, sea relevado de ese cargo por designación de la presidenta del gremio, Elba Esther Gordillo Morales, en el encuentro del XXV Consejo Nacional Extraordinario, que quizá se realice esta semana.
Hasta ahora los dos principales aspirantes a sustituir a Rafael Ochoa Guzmán son Sanjuana Cerda Franco y Alfonso Cepeda Salas; sin embargo, se ha destacado en el último año —como parte de las actividades electorales del magisterio— la labor que realizó el ex diputado federal, Enrique Meléndez Pérez, en la elección de Baja California.
Quien se ve impedido por los Estatutos para ocupar dicho cargo es el subsecretario de Educación Básica, Fernando González Sánchez, yerno de la maestra.
Quien aspire al segundo puesto de la dirigencia del magisterio, señala el documento, debe tener por lo menos 11 años dentro de la organización y haber ocupado un cargo dentro de la dirigencia nacional, y González Sánchez no cumple esos requisitos.
El Estatuto, vigente desde 2004, “podría no ser respetado por los consejeros”, dijeron integrantes de la Asociación Ciudadana del Magisterio y de la Junta Nacional de Gobierno Sindical.