Un grupo de dirigentes del Partido del Trabajo (PT) exigió ayer la remoción definitiva de Alberto Anaya como líder nacional tras 18 años de mantener “como negocio personal al partido” y señalaron que acudirán a las instancias electorales a impugnar su reelección.
José Narro Céspedes, uno de los dirigentes históricos del PT, acusó directamente a Anaya de haber convertido a ese instituto político en “patrimonio familiar”. No puede ser presidente del partido y senador de la República, sentenció.
Admitió además que no hay cuentas claras de los recursos que maneja ese partido y todo se hace con absoluta discrecionalidad. “Tú no puedes defender la democracia para afuera, pero adentro no’más mis chicharrones truenan”, reclamó.
Dijo que los cambios anunciados el pasado fin de semana en el Congreso del PT no modifican nada y sólo añaden a un grupo de sus incondicionales.
Entre estos se encuentran los hermanos Oscar y Alejandro González Yañez, que han ocupado ininterrumpidamente cargos importantes. El primero es ahora presidente municipal de Metepec y el segundo, senador de la República. “Son parte de la parafernalia”, dijo.
También fueron añadidos a la dirigencia colectiva Amador Espinoza, de Chiapas; Reginaldo Sandoval, de Michoacán; Pedro Vázquez, de Nuevo León y Oscar González, del estado de México.
Ante dicha situación, Narro Céspedes convocó a la realización de un Foro Nacional de las Izquierdas en el que plantearán la creación de un “Frente Político-Electoral” para 2009.
En este esfuerzo, dijo, el PT podría sacrificar su propio emblema partidista y modificar sus estatutos y documentos básicos, para dar entrada a otras organizaciones y partidos como Alianza Social y enfrentar así la reciente reforma electoral.
Esto, luego de que el pasado 6 de julio el Tribunal Electoral ratificó la decisión de terminar con las alianzas de la llamada “vida eterna”, que permitía a los partidos chicos coaligarse con los grandes para que éstos les proporcionaran porcentajes de votación.
A partir del proceso federal del próximo año, cada partido tendrá que obtener por sí solo el número suficiente de votos para mantener su registro. De ahí la propuesta de Narro para formar esta Alianza, con base en el registro que posee el PT.
El PT forma parte del Frente Amplio Progresista (FAP), junto con el Partido de la Revolución Democrática (PRD) y Convergencia, desde donde se ha apoyado el movimiento del ex candidato presidencial Andrés Manuel López Obrador.