A consecuencia de una larga enfermedad, ayer a las 09:00 horas dejó de existir el deportista Ricardo Gutiérrez del Bosque, quien contaba con 53 años de edad y era miembro de una de las familias con mayor presencia en el deporte regional.
Nacido un 14 de julio en esta ciudad, Ricardo logró importantes éxitos en el deporte, donde se destacó en disciplinas como la natación y el canotaje, sus grandes pasiones, que lo llevaron a obtener muchas preseas y satisfacciones personales.
Al igual que sus hermanos Óscar, Eduardo, Luis, Guillermo, Sarita, Susana y Jacqueline, desde niño fue iniciado en el deporte por sus padres don Luis Gutiérrez Vela y Sarita Gutiérrez, quienes les inculcaron el valor del deporte en su formación personal.
Tras conocer la fatal noticia, la familia del automovilismo lagunero, encabezada por Francisco Alvarado Paissan y Óscar Rodríguez Aguirre, manifestaron sus condolencias a la familia Gutiérrez del Bosque, la cual se encuentra íntimamente ligada a esta actividad.
Ayer una gran cantidad de amigos y deportistas se dieron cita en la capilla de Funerales Serna, donde son velados los restos de Ricardo, para solidarizarse con la familia.
SE FUE EL “GATO NEGRO MAYOR”
El profesor Jaime Alvarado, entrenador de natación desde hace varias décadas en el Instituto Tecnológico de La Laguna, mostró su respeto y solidaridad con la familia Gutiérrez del Bosque, al recordar que Ricardo el “Gato Negro Mayor” fue su alumno más destacado dentro del área de natación.
“Es una pérdida muy lamentable, porque además de ser un excelente deportista siempre se caracterizó por ser un gran ser humano, solidario y enemigo de injusticias”.
El entrenador recordó que en su momento, Ricardo Gutiérrez fue el mejor competidor que tuvo el Tecnológico de La Laguna y fue parte fundamental para que el equipo de los Gatos Negros lograra conseguir 14 títulos nacionales en los Juegos Nacionales Intertecnológicos, ocho subcampeonatos y siete terceros lugares.
Entre 1973 y 1977 estudió en esta institución la carrera de Ingeniería Industrial, y logró combinar a la perfección sus estudios con el deporte, donde obtuvo importantes satisfacciones personales, entre ellas el hecho de que en 1973 representó a México en la Universiada Mundial efectuada en Rusia.
De 1974 a 1976 logró tres campeonatos nacionales individuales en los Intertecnológicos, luego de cosechar en cada edición una importante cantidad de medallas de oro, ello gracias a su extraordinaria técnica y cualidades naturales para la práctica de este deporte.
En 1976 impuso un récord nacional en los 400 metros estilo libre, marca que se mantuvo vigente por 16 años. En ese mismo año estuvo a punto de lograr su lugar como seleccionado mexicano para los Juegos Olímpicos de Montreal pero se quedó a unas centésimas de su objetivo.
“Sin duda que se trata de un elemento que lejos de morir deja una semilla en el ámbito deportivo, la que sin duda habrá de germinar en otros exponentes de la natación lagunera, de forma especial entre los representantes del Tec Laguna, institución que el ‘Gato Negro Mayor’ llevaba tatuada en su corazón, ya que siempre se sintió orgulloso de ser parte de esta comunidad estudiantil”, concluyó el profesor Alvarado.
HOY EL ÚLTIMO ADIÓS
El cuerpo de este deportista lagunero es velado desde ayer por la tarde en Funerales Serna de avenida Juárez, donde hoy, en punto de las 12:00 horas, se realizará una misa de cuerpo presente en la iglesia de San José (calle 11 y avenida Escobedo), y a las 19:00 horas sus cenizas serán depositadas en la cripta de este templo, justo al lado de sus padres.
