Alfredo del Orbe cumple 50 años de carrera en este 2008.
Bien vale la pena festejar 50 años de trayectoria y eso es lo que hará Alfredo del Orbe.
Todo está listo para que el cantante festeje sus cinco décadas en la música con un gran concierto que ofrecerá el próximo jueves seis de noviembre a partir de las 8:00 de la noche, en el Teatro Alberto M. Alvarado de esta ciudad.
“No quería dejar pasar la oportunidad de celebrar mis 50 años en la música. Es una forma de agradecer a las personas el apoyo que me han brindado y que ha ocasionado que continúe en la escena artística. Voy a cantar todos mis éxitos”.
Para este evento que será dirigido por Pablo Lira, Alfredo contará con la participación de dos de sus amigos. “Me van a hacer el favor de acompañarme ese día, Pepe Hernández y Mundo Miranda, que son muy reconocidos en Monterrey. Para solventar algunos de sus gastos, porque ellos vendrán desde allá, vamos a cobrar una cooperación en el teatro que será de 50 pesos”.
El cantante visitó esta casa editora para anunciar este show y de paso recordó que fue en 1958 cuando se inició en el escenario, todo gracias a su participación en un programa llamado Aficionados de los Ejidos.
“Desde niño me gustaba cantar y me di a conocer por un programa, Aficionados de los Ejidos, de éste también surgió Lorenzo de Monteclaro y otros artistas. A la fecha cuento con 40 discos y un sin fin se sencillos.
“En aquel tiempo lo grupero no tenía tanta fuerza, la gente lo veía como algo corriente. En los sesentas y setentas habíamos varios exponentes del género norteño como Juan Montoya, Homero Prado o Juan Salazar, no existía Pesado ni Intocable, sólo éramos nosotros y batallábamos para abrirnos espacios. Hoy en día ya no, hay demasiado auge en radio, televisión y prensa para este género”.
Comentó que también probó suerte en el cine, pero no le satisfacía tanto como interpretar una melodía. “Me fue bien en el Séptimo Arte, hice como tres películas con los Almada, Julio Alemán y ‘Chelelo’, por mencionar algunos. Me di cuenta que no era lo mío, además era mucha pérdida de tiempo pues para grabar una escena ahí te tenían como 15 o 20 días”.