Unida a la riqueza y diversidad cultural de nuestra nación, anualmente, más de cuatro centenares de festivales de todo tipo y en todas nuestras regiones se celebran en México; festivales que son el encuentro reconciliado de todas las expresiones, el estallido mismo de lo diverso, porque ahí, en la diversidad está la raigambre de un país que encuentra en la fiesta de la cultura el enriquecimiento del espíritu ciudadano.
El sistema de información cultural del Conaculta habla de que año con año los festivales culturales se han incrementado de manera significativa, pasando de 308 en 2002, a más de 400 en 2008.
En México hay festivales para todos los gustos, desde el Festival Internacional Cervantino, pasando por la fiesta de fiestas de América Latina “La Guelaguetza”, o por el Festival de la Diversidad Sexual o el Festival Internacional de Narración Oral en Zacatecas; Africala, Festival Internacional de Cine de la Ciudad de México; la Cumbre Tajín, Festival de la Identidad, de Xalapa; El Festín de los Muñecos, Festival Internacional de Títeres de Guadalajara; el encuentro bianual de Decimistas y Versadores de Latinoamérica y el Caribe, en San Luis Potosí, el Festival Internacional Tamaulipas, etc.
En cualquiera de los cientos de festivales culturales nos reencontramos con una fiesta a la vida, a la tierra, a la palabra, al amor, basta sentarnos a contemplar cualquiera de ellos para que nuestra alma se una a los artistas que con esa capacidad alquímica hacen volar nuestra imaginación por los confines del universo.
El Festival Internacional Tamaulipas (FIT) celebra este año su décima edición, significa la posibilidad de una valiosa apertura y encuentro de las artes del mundo y de México con las de mi tierra, un enriquecimiento de cosmovisiones culturales y concepciones del arte que durante diez años se han ido arraigando paulatinamente, generando vínculos de identidad y consolidándose entre una ciudadanía ávida de enriquecer su espíritu a través de la vertiente cultural.
Durante diez años, en los 43 municipios de Tamaulipas se ha sentido un caleidoscopio multicolor con la presencia de 47 países con más 35 mil artistas en escena, el festival en sí mismo es una muestra del trabajo ordenado, sistematizado y coherente del gobernador Eugenio Hernández Flores y la señora Adriana González de Hernández.
El trabajo de ambos en todos los rubros se ha sentido por una parte trabajando en obras de infraestructura, por otra en el desarrollo humano, es ahí donde se inserta este festival que está plenamente enraizado en el gusto ciudadano, y que gracias a su buen desarrollo ha generado un profundo sentido social de pertenencia, que ha hecho que nos enamoremos de nosotros mismos.
Del 11 al 26 de octubre hombres y mujeres con el oficio de vida de artistas, por distintas veredas y muchos caminos han llegado a Tamaulipas para mostrarnos su mundo –el suyo, el nuestro, el de todos– poniendo en escena una rica mezcla plena de potencialidad de vida y arte, propiciando un diálogo enriquecedor entre pasado, presente y futuro, aunque los artistas aparentemente llegan, actúan y se van, algo de ellos se queda con nosotros.
El Festival Internacional Tamaulipas, construido sobre trabajo, visión educativa de largo alcance, arte, cultura y valores es una buena muestra de cómo los hombres de todas las vertientes culturales, de todos los credos, de todas las latitudes, de todas las razas, nos hermanamos y reencontramos, en un espacio que privilegia la cultura como encuentro reconciliado de los hombres... mi solar nativo, una tierra que bien gobernada por Eugenio Hernández y Adriana es proveedora de esperanza... Tamaulipas.
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