Los brotes de brucelosis y tuberculosis ocasionaron la desconfianza de los norteamericanos para la compra de ganado duranguense.
La sequía e inundaciones son sólo una parte de los problemas que tienen que sortear los productores, pues además tienen que librar las enfermedades de los animales y vender a precios muy bajos.
Durango. Además de todos los problemas que tuvieron que sortear los ganaderos del estado a causa de la intensa y prolongada sequía, considerando las pérdidas por la escasez de pastizales, haber superado este inconveniente tampoco implica un panorama halagador para el sector pecuario. El presidente de la Comisión de Desarrollo Rural del Cabildo, Roberto Arreola Arreola, informó que éste ya no es un negocio pues el precio del kilo de ganado se ha devaluado, además de todos los inconvenientes que tienen que afrontar si desean hacer exportaciones a Estados Unidos.
Situación lamentable. “Es un grave problema, el ganado anda ahorita a 20 pesos el kilo aquí en Durango cuando llegó a andar a 32 ó 34 pesos; aparte si exportábamos 200 mil cabezas de ganado ahorita se exportan tres mil, comparó el ex diputado federal. Explicó que a pesar de que en antaño llegó a ser uno de los negocios más rentables del sector agropecuario, la exportación de ganado a Estados Unidos actualmente ya no lo es, debido principalmente a que el precio de la libra ha disminuido y de que en este momento la política del vecino país del norte a causa de los brotes de tubercolosis y brucelosis, les ha cerrado las puertas a casi la totalidad de los ganaderos duranguenses.
“Aunque estemos libres (de las enfermedades del ganado) y llevemos a cabo pruebas de antígeno para detectarlo, tanto en madres como hijos, en Estados Unidos todavía tenemos las puertas cerradas”.
Gringos crean su negocio. Roberto Arreola detalló que en Estados Unidos se ha desarrollado una política que les ha permitido crear dos tipos de engorda de ganado, con apoyos en los que el Gobierno Federal apoya hasta con 60 por ciento el costo de engorda de una cabeza; el primer tipo implica la inyección de agentes anabólicos que les aumenta de peso hasta dos kilo diarios pero es ganado que tiene como destino principal el de la exportación; el otro es para consumo de los norteamericanos y consiste en otro tipo de alimentación que no implica anabólicos.
Panorama incierto. “Aquí en México han iniciado grandes engordas, pero lo hacen empresarios que tienen 30 mi becerros y pasa en ciudades como en Gómez Palacio, Monterrey, Guanajuato y otras de Sinaloa; que producen pero para consumo nacional. Entonces eso de la exportación se acabó prácticamente y la cría de ganado está en algo que ya no es costeable de manera definitiva”, finalizó el Presidente de la Comisión de Desarrollo Rural del Cabildo.
Juan Manuel Cárdenas
El Siglo de Durango
No se vislumbra solución
Durango. El presidente de la Comisión de Desarrollo Rural del Cabildo, Roberto Arreola Arreola, fue cuestionado sobre el panorama que pinta para los ganaderos duranguenses en su situación económica. Respondió que se ve muy difícil que se aclare por lo menos a corto plazo y amplió que la solución sería la llamada Ciudad Pecuaria, donde los propietarios podrán llevar a su ganado a engordarlo ahí aunque esto implique el cobro de cierto porcentaje dependiendo del peso que haya subido, pero éste es el fin principal de esta zona que todavía no presenta avance alguno pues lo único que se tiene es el terreno donde estará asentada y sigue siendo un proyecto.
(datos)
La situación de los criadores se considera grave pues el kilo de ganado oscila en los 20 pesos en Durango.
La exportación de ganado a Estados Unidos ha dejado de ser un buen negocio, a pesar de que anteriormente llegó a ser uno de los más lucrativos del sector agropecuario en esta entidad.
Los norteamericanos le han cerrado las puertas a los ganaderos duranguenses con pretextos como los brotes de tuberculosis y brucelosis, a pesar de que se realizan pruebas periódicas de detección.
