Garantice el futuro de sus hijos; asegure sus estudios
Únicamente 8 de cada 100 jóvenes concluyen sus estudios superiores, según datos del INEGI
La educación es el mejor legado para los hijos y también es el medio que puede garantizarles un mejor futuro en un mercado laboral cada vez más competitivo. La Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) señala que sólo ocho de cada 100 alumnos concluyen sus estudios superiores, según cifras del INEGI, y una de las principales causas de la deserción escolar es el factor económico.
Ante este panorama, los seguros educativos son una alternativa para prevenir y garantizar la continuidad de los estudios universitarios y de postgrado, ante imprevistos como invalidez o muerte de los padres o tutores, y más frecuentemente, por la falta de ingresos económicos.
Estos seguros educativos son instrumentos financieros o de supervivencia del menor, en el que durante determinado tiempo el tutor paga una prima (mensual, trimestral, semestral o anual) y el beneficiario recibirá al cumplir 15, 18 ó 22 años una suma asegurada para continuar sus estudios.
La oferta de estos seguros está a cargo de las aseguradoras que se dedican a la venta de servicios de previsión y protección contra posibles riesgos que pudieran afectar propiedades, bienes y la integridad física de las personas.
Tienen tres componentes: ahorro, pues se trata de aportaciones periódicas para alcanzar la suma asegurada; seguro, ya que cubre el riesgo contra invalidez o fallecimiento de los tutores; e inversión, pues el ahorro acumulado crece con el tiempo para que no pierda su poder adquisitivo.
La Profeco expone que los seguros educativos están diseñados para conformar un ahorro que cubra la educación de los menores a través de diversos planes que se diferencian de acuerdo con la cobertura, periodicidad del pago de la prima, edad del menor, sexo edad y hábitos del contratante, y la suma asegurada. La suma asegurada mínima va de 22 mil 500 a 30 mil dólares, que cubre los costos en instituciones públicas y, en algunos casos, privadas, mientras que la suma máxima va de 50 mil a 100 mil dólares, que cubre incluso universidades extranjeras.
Contratar un seguro educativo a los seis meses de edad del menor o a los 12 años puede representar una diferencia en el monto de las primas de hasta 420 por ciento, por lo que si considera contratar un seguro, es mejor hacerlo a edad temprana del niño. También es preferible la prima anual a la mensual, pues los intereses por pagos fraccionados son de hasta diez por ciento.
Al recoger el seguro, corrobore que se le entregue la suma acordada; recuerde que en los seguros educativos la suma asegurada no necesariamente debe destinarse a este fin, porque tal vez el menor ya no desee estudiar.
Cuestiones a considerar
Antes de contratar un seguro educativo, la Profeco recomienda considerar lo siguiente:
-La aseguradora debe estar autorizada por la Secretaría de Hacienda y el agente de seguros por la Comisión Nacional de Seguros y Fianzas.
-Por lo menos analice y compare tres opciones:
-Antes de firmar, lea con detenimiento las condiciones generales de la póliza, y si tiene dudas o alguna inconformidad, coméntelo con su agente de seguros.
-Conozca los plazos, cobros, exclusiones y penalizaciones a las que se sujetará según el caso.
-Antes de firmar el contrato, es importante revisar minuciosamente que sus datos sean correctos.
-Antes realice una evaluación de sus finanzas actuales y de sus expectativas tanto económicas como familiares, pues la llegada de otro hijo puede cambiar la distribución de los gastos.
Y MIENTRAS DURA EL CONTRATO, LA PROFECO ADVIERTE LO SIGUIENTE:
-Ya con la documentación de los pagos realizados.
-Su agente de seguros seguirá asesorándolo ante cualquier duda o eventualidad.
-Si desea cancelar el seguro durante los dos primeros años no recuperará ninguna suma debido a los gastos de adquisición y administración en los que incurrió la aseguradora.
-Al cancelar su seguro, obtendrá el valor de rescate de la suma siempre que se encuentre al corriente en el pago de sus primas.
-Los contratos se renuevan cada año y en forma automática, si desea cancelar hágalo en el aniversario de la póliza.
-Si no puede seguir pagando la prima, coméntelo con la aseguradora, ellos le brindarán opciones.
-No pague en efectivo ni con cheque en blanco, utilice cheques a nombre de la empresa.
FUENTE: Profeco