General Motors (GM) anunció ayer que cerrará en el segundo trimestre de 2010 la planta de producción de transmisiones que tiene en la ciudad canadiense de Windsor y que emplea a unas 1.400 personas.
La planta, situada a unos 330 kilómetros al suroeste de Toronto, produce transmisiones automáticas de cuatro velocidades para su uso en plantas de montaje de General Motors en Estados Unidos y México.
Los vehículos que utilizan estas transmisiones son en las versiones regulares e híbridas de los modelos Malibu, Vue y Aura, así como en los Pontiac G5 y G6, Chevrolet Cobalt y HHR.
GM justificó la decisión por la progresiva sustitución de transmisiones automáticas de cuatro velocidades con cambios de seis velocidades, que ofrecen un menor consumo de combustible y más rendimiento.
El presidente de General Motors en Canadá, Arturo Elías, afirmó en un comunicado que esta "extremadamente difícil decisión en forma no supone un reflejo de nuestra excelente fuerza de trabajo en Windsor o su excelente historial en la producción de grandes transmisiones".
"Hemos trabajado de forma extensa con nuestros socios laborales y gubernamentales pero hemos llegado a la inevitable conclusión que para esta planta no hay productos de reemplazo", añadió Elías.
La empresa también dijo que cooperará con el sindicato Canadian Auto Workers (CAW) -que representa a los trabajadores afectados- "para desarrollar los planes apropiados de transición" de cara al cierre de la planta en 2010.
CAW dijo que en las próximas horas dará una respuesta oficial a la decisión de General Motors.