Un eclipse total de luna ocurre cuando el planeta Tierra se interpone entre el Sol y la Luna, es decir, cuando la Luna entra en la zona de sombra de la Tierra. (Archivo)
Muchas personas creen que el eclipse total de Luna anunciado erróneamente para el pasado 20 de enero en muchos medios de comunicación ya paso, pero no es así, afirman miembros de la sociedad astronómica Urania del estado de Morelos.
La comunidad de astrónomos aficionados y profesionales en todo el mundo se mantiene a la expectativa de este gran evento celeste, en el cual la Luna será cubierta completamente por la sombra de la Tierra por espacio de 52 minutos.
El continente más favorecido para la observación del eclipse será el Americano, en donde prácticamente será visto en todas sus fases, así como el oeste de África y casi la totalidad de Europa.
Por el horario en que se producirá, resultará muy cómodo de observar para los habitantes del continente Americano, mientras que los Europeos y Africanos lo verán durante las horas previas al amanecer.
En otras regiones de África, medio oriente y Asia el evento se verá parcialmente debido a que la Luna se ocultara durante el eclipse.
Mecánica celeste
El evento que será visible a simple vista, oscurecerá la brillante superficie de una Luna llena, fase necesaria para que ocurran este tipo de fenómenos celeste.
Un eclipse total de luna ocurre cuando el planeta Tierra se interpone entre el Sol y la Luna, es decir, cuando la Luna entra en la zona de sombra de la Tierra.
Un eclipse total lunar tendrá lugar cuando nuestro satélite penetre completamente en el cono de sombra proyectado por la umbra (parte más oscura de la sombra) de la Tierra en el espacio.
La duración de un eclipse total de Luna puede llegar a 1 hora y 47 minutos como máximo, que en el caso de el eclipse lunar este 20 de febrero, se prolongara por 52 minutos.
El oscurecimiento de la Luna por efecto de su entrada en el cono de sombra de la Tierra casi nunca es completo, porque el cono de sombra no está totalmente oscuro, sino que conserva una tenue luz rojiza que le confiere a nuestro satélite un color cobrizo.
Mitos lunares
Pese a conocer las causas científicas de los eclipses de Luna, sobreviven aun algunas supersticiones en México y otras partes de América, heredadas de las antiguas culturas mesoamericanas, así entre los Aztecas por ejemplo se creía que si una mujer embarazada miraba los eclipses de sol o de luna su hijo nacería con labio leporino (un labio metido), pues los mexicas creían que un eclipse era debido a mordidas dadas al astro en cuestión.
Para evitar daños colocaban en el seno de la mujer una navaja negra con ceniza del fogón si le era preciso salir de noche. Cuando se producía un eclipse, creían que la Luna moría; si una mujer embarazada salía de su casa durante un eclipse de Luna, debía llevar a la cintura una hoja de obsidiana, sin la cual su hijo nacería con labio leporino, su rostro se parecería al del conejo lunar, que creían ver en la cara visible de la Luna.
La ciencia sabe que no existe ninguna influencia maligna durante los eclipses y que pueden ser observados sin ninguna preocupación.
Historia
Hace 2 mil 500 años, el célebre matemático griego Pitágoras observó durante un eclipse de luna que la sombra proyectada sobre nuestro satélite era redonda, adelantando la idea que resultaría ser la correcta sobre la esfericidad de la Tierra.
En uno de sus últimos viajes a América, en 1504, el explorador y navegante Cristóbal Colón salvó la vida en Jamaica, en el Caribe, prediciendo un eclipse total de luna, atemorizando a los aborígenes con lo que ellos pensaron eran poderes sobrenaturales. A lo largo de la historia los eclipses han causado temor y desconcierto entre diferentes pueblos, para quienes simbolizaba la muerte del Sol o de la Luna.
Observación
Durante la fase umbral comienzan a apreciarse algunos cambios conspicuos en el brillo de la luna.
En los eclipses lunares, a diferencia de los solares, la superficie de la Luna no desaparece por completo al penetrar el cono de sombra que la Tierra proyecta sobre ella, sino en todo caso disminuye notoriamente su brillo hasta en un factor 100 mil veces menor a su brillo o magnitud habitual , desapareciendo virtualmente del cielo.
De acuerdo con la sociedad astronómica Urania, después de haber sido favorecidos con tres eclipses totales en menos de un año, tendremos un periodo de calma, ya que los próximos serán parciales y únicamente visibles en Europa y Asia el 16 de agosto del 2008 y el 31 de diciembre del 2009.
Para México y otras regiones de América la espera será de más de dos años, hasta el 20 de diciembre del 2010, cuando seamos testigos de otro eclipse total de Luna.
La observación del eclipse lunar no requerirá de la ayuda de ningún instrumento óptico de acuerdo a Urania, solo de condiciones atmosféricas idóneas para su contemplación, no estando de más el empleo de binoculares o un telescopio con los cuales ver con más detalle el avance de la sombra terrestre sobre la Luna hasta cubrirla completamente.
Horarios del eclipse total de luna del 20 de febrero, tiempo del Centro de México:
Inicia el eclipse (fase penumbral imperceptible) 18:35 horas inicia eclipse parcial (umbral visible) 19:43 horas.
Inicia fase total 21:01 horas máximo del eclipse.
21:26 horas finaliza eclipse total 21:51 horas.
Finaliza eclipse parcial 23:09 horas finaliza eclipse (fase penumbral imperceptible) 00:17 horas.
