Lolita Cortés se prepara arduamente antes de salir al escenario.
Antes de entrar a escena, Lolita Cortés ensayaba los bailes y repetía sus diálogos mirando al texto, pues no quería dar una mala impresión a quien criticó de manera severa como juez en la tercera generación de “La academia”.
Carlos Rivera por su parte, procuró dormir bien la noche anterior a fin de ofrecer su mejor interpretación, no sólo para el público que agotó las localidades de este domingo, sino ante quien considera “es la culpable de que yo esté haciendo teatro musical”.
Al escenario de La Bella y la Bestia, ambos ingresaron hechos un manojo de nervios, pero “ya después me sentí tranquila, me dio confianza estar a su lado y se lo dije en la escena de la biblioteca, pues ahí tenemos tiempo de platicar un poco”, comentó Cortés.
“Durante la historia, el primer momento en que estamos juntos fue padrísimo, sobre todo, cuando ella canta la frase ‘magia es lo que hubo aquí’ porque realmente eso fue lo que existió entre nosotros”, añadió Carlos.
Lolita Cortés rechazó evaluar a Carlos, tal como lo hacía antes, pues indicó que habían ocupado el mismo espacio y lo único que podía expresar es agradecimiento por compartir escena con alguien tan talentoso.
“No puedo decir absolutamente nada, estamos pisando el escenario de la misma manera. Sabía que después de estarlo molestando tanto en el programa, ahora yo tenía que demostrar que no me equivoco. Le agradezco a la vida el hecho de que todas las cosas se dieran para lograr esta función, es un deseo que teníamos”, apuntó la actriz y cantante.
Para Carlos Rivera estar a la par de quien es considerada una de las mejores representantes del teatro musical en México fue “como un sueño hecho realidad”.
