Estudios anteriores habían demostrado que el gen receptor de melanocortina-4 está presente en neuronas en el hipotálamo y es un regulador clave de la ingesta de comida y del gasto energético.
Un consorcio internacional de científicos ha descubierto variaciones genéticas que incrementan el riesgo de la obesidad y la resistencia a la insulina en la población, tal como explican en dos estudios publicados por la edición digital de "Nature Genetics".
Hasta ahora sólo un gen, el FTO, se había asociado de forma convincente al aumento del riesgo de sufrir obesidad.
Un consorcio internacional de investigadores dirigidos por Mark McCarthy, Inés Barroso y Nicholas Wareham analizaron los genomas de más de 90 mil personas y descubrieron una variante cercana al gen MC4R incrementa la susceptibilidad a padecer obesidad.
Estudios anteriores habían demostrado que el gen receptor de melanocortina-4 está presente en neuronas en el hipotálamo y es un regulador clave de la ingesta de comida y del gasto energético.
Aunque aún no está claro cómo esta variante afecta a la expresión o función del MC4R, el hecho de que se sepa qué mutaciones en ese gen están en el origen de casos raros de obesidad infantil grave da confianza a esta asociación.
En otro estudio, científicos dirigidos por Jaspal Kooner, de la Universidad Imperial College de Londres, investigaron a varios miles de personas de ascendencia indo-asiática o europea e identificaron que una variante cercana al mismo gen incrementa el riesgo de obesidad y de resistencia a la insulina.
Esa variante de riesgo es más frecuente en individuos con ascendencia indo-asiática, lo que, a juicio de lo investigadores, debe tenerse en cuenta para abordar el incremento de obesidad en la población de esa región.