Las mamás obesas tienden a castigar a sus hijos cuando creen que no comen suficiente, además sirven más comida de la necesaria en los platos.
Realiza Centro de Investigación en Ciencias de la Salud estudio en secundaria y preparatoria
Los niños tienen mayores posibilidades de tener kilos de más si sus madres son obesas, según reveló un estudio que realizó el Centro de Investigación en Ciencias de la Salud en una escuela secundaria y en una preparatoria de Torreón.
El objetivo fue establecer si hay asociación entre conductas alimentarias maternas y la obesidad de sus hijos, para lo cual se encuestaron 100 alumnos y sus madres, además se les tomó peso, talla, Índice de Masa Corporal (IMC), cintura, cadera, perímetros del brazo y muslo, entre otros.
Los estudios revelaron que “el 70 por ciento de las madres presentó sobrepeso y obesidad; si la madre incrementa una unidad su IMC, el del hijo aumenta 0.27; si la madre es obesa, el IMC del niño se incrementa 3.3 unidades”.
Además se determinó que “con madres obesas, los hijos comen 3.6 veces más si están aburridos, tristes o enojados. Las madres obesas castigan 2.6 veces más al hijo para que coma porque creen que el alimento que ingieren no es suficiente; y sirven 2.5 veces más de todos los alimentos en un mismo plato”.
Celsa López Campos, subdirectora del Centro de Investigación en Ciencias de la Salud de la Facultad de Medicina, y los doctores Eduardo Mayet Machado y Juan Carlos Cevallos López, fueron los responsables de la investigación “influencia de las madres en la obesidad de sus hijos”.
La doctora López Campos señaló que las prácticas alimentarias de las madres tienen una influencia definitiva en la obesidad infantil, pues además de que el estudio reveló que el 70 por ciento de las señoras encuestadas tiene obesidad, se determinó que el 17 por ciento de los niños también son obesos y el 59 por ciento de las niñas tienen sobrepeso.
En las escuelas donde se llevó a cabo este estudio aún no se implementan las medidas necesarias para disminuir la obesidad y sobrepeso en los alumnos y sus madres, pues el Centro de Investigación en Ciencias de la Salud realizará primero otra investigación en 40 escuelas públicas y primarias.
El objetivo es lograr una nueva generación de niños que rompa la tendencia a la obesidad y sobrepeso, y para eso es necesario que las madres de familia aprendan cómo alimentar a sus hijos, además es importante que dejen el sedentarismo.
La Organización Mundial de la Salud declaró la obesidad como la epidemia del siglo XXI, mientras que la Encuesta Nacional de Salud 2006 reporta que la obesidad aumentó un cinco por ciento en hombres y un 10 por ciento en mujeres en los últimos seis años.
Resultados
Algunas de las conclusiones del estudio “Influencia de las madres en la obesidad de sus hijos”, fueron:
Los hijos de madres obesas comen 3.6 veces más.
Las madres obesas sirven de todos los alimentos 2.5 veces más.
Las madres obesas castigan 2.6 veces más a sus hijos por la comida.
Si la madre incrementa una unidad su IMC, el hijo incrementa 0.27.
Si la madre es obesa, el IMC del niño incrementa 3.3 unidades.
FUENTE: Centro de Investigación en Ciencias de la Salud
