Humilla Bolivia 4-2 a Paraguay
La selección de futbol de Bolivia humilló a su similar de Paraguay, en el encuentro de los dos extremos de la tabla de las eliminatorias sudamericanas al Mundial de Sudáfrica 2010, en el Estadio Hernando Siles.
Un escenario con escaso público fue la prueba de que la afición local había dejado de confiar en su equipo, ubicado en el fondo de las posiciones, mientras los guaraníes venían soberbios como únicos punteros, y manteniendo su condición de invictos.
En el campo la imagen era diferente, Bolivia pareció ser el favorito y Paraguay el de la desteñida carrera en el torneo, con los verdes tomando la iniciativa siempre por medio de un buen juego, que sorprendió a los adversarios, muy económicos, dosificados y temerosos de la altura.
A los 22 minutos, Joaquín Botero abrió el marcador con un buen disparo sobre el cuerpo del arquero Aldo Bobadilla, y enseguida, a los 25, Ronald García aumentó ante una deficiente cobertura defensiva y mal cálculo del portero de Paraguay.
Siguió siendo mejor el dueño de casa, ante una tímida reacción de los visitantes y en la segunda etapa, apelando a cambios con tres hombres frescos en ataque, el técnico argentino Gerardo Martino intentó mejorar el panorama de los guaraníes.
A los 65 minutos, Roque Santacruz (que había ingresado poco antes) dio el toque de alarma para Bolivia, con el gol que significó descuento para Paraguay, pero a los 70, Botero que estaba con todas las luces, aprovechó otro error del guardameta Aldo Bobadilla y elevó a 3-1 la diferencia.
Cinco minutos después, Marcelo Moreno de tiro libre confirmó la mala tarde del cuidavallas paraguayo, convirtiendo el cuarto para Bolivia, echando por tierra las intentonas albirrojas, que se concretaron en el segundo tanto a los 82 minutos, a través de Nelson Haedo.
Para Bolivia, fue un excelente triunfo dentro de la pálida gestión que ha venido reeditando desde el inicio de la competición rumbo al Mundial de 2010, y aprisiona cuatro puntos en seis fechas, mientras Paraguay se va con una enorme frustración a pocos días de una feliz gesta ante Brasil.
