El huracán Ike abandonó esta tarde Cuba por la costa norte de la provincia noroccidental de Pinar del Río, tras haber dejado al menos cuatro muertos y cuantiosos daños materiales en esta isla caribeña.
Ike con categoría uno salió al mar para internarse en el Golfo de México a las 15:45 horas locales por las inmediaciones del municipio pinareño de Manuel Sanguiny, informó el jefe de pronósticos del Instituto de Meteorología, José Rubiera.
El meteoro fue el segundo que azotó el occidente de Cuba en los últimos diez días, pero antes había recorrido la isla de este a oeste desde el pasado domingo.
A su salida al mar llevaba vientos de 120 kilómetros por hora y dejó una estela de lluvias que están afectando todavía y provocando inundaciones desde el extremo occidental de Cuba hasta la provincia sur-surcentral de Cienfuegos.
En esta capital, donde fueron evacuadas unas 250 mil persona muchas calles están obstruidas por árboles, postes caídos y se reportaron al menos 16 derrumbes de viviendas, la mayoría parciales, y sin lesionados.
Ike arrasó decenas de miles de viviendas escuelas, centros de salud, empresas estatales y cosechas agrícolas, según reportes parciales preliminares.
Al igual que en otras ciudades del país en esta capital se carece de servicio eléctrico, excepto en hospitales, entidades económicas o de servicios como los medios de comunicación, aunque dos canales de televisión tuvieron que ser retirados del aire.
