La osamenta localizada la mañana del jueves en las inmediaciones de la ampliación San Carlos fue identificada, estableciéndose que corresponde a un comerciante cuya desaparición se reportó hace cuatro meses.
El ahora occiso respondía en vida al nombre de Fernando Miramontes Maldonado, quien contaba con 47 años de edad y era originario de Torreón, Coahuila; sin embargo contaba con un negocio en la calle Tamazula, del Parque Industrial Lagunero.
La identificación de la osamenta se logró a través de las cuatro cicatrices que presentaba el cráneo, resultado de una cirugía practicada con anterioridad, informó la Agencia Investigadora del Ministerio Público de Delitos contra la Vida y Salud Personal, mesa I.
Personal del Servicio Médico Forense precisó que la causa de la muerte de Miramontes Maldonado fue una hemorragia interna producida por proyectiles de arma de fuego que se impactaron en diversas partes del cuerpo y estableciéndose que el tiempo de fallecimiento fue aproximadamente dos meses.
Familiares de Fernando Miramontes detallaron que presentaron una denuncia por su desaparición el pasado 19 de abril del año en curso.
Como se informó con oportunidad, alrededor de las 10 de la mañana del jueves, fue localizada la osamenta de Miramontes Maldonado, cuyos huesos se encontraban esparcidos en un radio de dos metros, pues el cuerpo fue consumido por los animales carroñeros.
En el lugar también se localizó un pantalón de mezclilla con cinto pitiado, un par de tenis color gris con vivos azules y verdes de medida 28, así como una camiseta blanca.
Además de recuperarse diez casquillos calibre 9 milímetros, en el área donde fue localizada la osamenta.