La eliminación de aranceles a la importación de aceites comestibles generará incertidumbre y afectará al empleo en el sector, alertó el director general de la Asociación Nacional de Industriales de Aceites y Mantecas Comestibles (Aniame), Amadeo Ibarra Hallal.
En entrevista, dijo que con la publicación ayer del decreto que elimina la Secretaría de Economía (SE) los aranceles, países como Argentina y Brasil podrán enviar al mercado mexicano aceites subsidiados, con impuestos diferenciados, así como otros beneficios para sus productos. “Cada empresa hará un análisis de la nueva realidad económica impuesta por el decreto a fin de tratar de sobrevivir en este nuevo entorno, pero es un panorama gris. Es el peor ambiente de negocios en la historia del sector”.
La industria del aceite, agregó, no teme a la competencia y de hecho compite con más de 40 países con los que México tiene un acuerdo comercial, como Estados Unidos, considerado el primer productor de aceites vegetales.
Según dijo Ibarra Hallal, la Secretaría de Economía no consultó a los industriales para eliminar los aranceles y usó como argumento que el precio del aceite había subido, pero en realidad -dijo el industrial- lo que se encareció fueron la materias primas, las cuales ya están bajando.
La medida, señaló, será “un golpe duro” para el programa de cultivo de oleaginosas con el cual se pretende sustituir entre 30 y 40 por ciento de las importaciones hacia 2012, ya que actualmente México registra un déficit de 90 por ciento en estos productos.
México, detalló, importa 4.5 millones de toneladas de semillas de canola y soya para elaborar aceites vegetales.
En este contexto, el representante de los industriales anticipó que el sector no crecerá este año, al registrar una producción de sólo 2.49 millones de toneladas de aceites y grasas y 5.27 millones de toneladas de pastas para alimentos balanceados, cuando en otros años reportaba crecimientos de dos a tres por ciento.
