El incremento en los precios internacionales del petróleo proyecta un aumento sustancial en el costo de los materiales que se utilizarán en los comicios de 2009, por lo que el IFE busca alternativas para atenuar el impacto.
El director ejecutivo de Organización Electoral, Miguel Angel Solís, indicó que en 2006 haber usado polipropileno, derivado del petróleo para elaborar diversos materiales que se usan en la jornada cívica, hizo experimentar al IFE una alza en los costos.
"El incremento de los precios del petróleo nos haría esperar también un incremento sustancial. Hemos hecho una búsqueda luego de 2006 y los resultados no han sido muy satisfactorios", señaló el funcionario del Instituto Federal Electoral (IFE).
Expuso que "hay una escasa disponibilidad en el mercado de algún otro tipo de materiales que mantengan la misma calidad, la transparencia y el avance que se ha experimentado con el transcurso de los diversos procesos".
Explicó que entre las alternativas que explora el órgano electoral está buscar materiales y diseños que permitan alargar la vida útil de los instrumentos, a fin de que sean usados en al menos tres procesos electorales federales distintos.
Solís precisó que entre las buenas noticias de cara a la elección intermedia el IPN notificó al IFE que el costo de la tinta indeleble que se utilizará en julio de 2009 será el mismo que en los comicios anteriores, aunque sea de mejor calidad.
Un informe de la Dirección Ejecutiva de Organización Electoral al que Notimex tuvo acceso detalla que entre las adecuaciones que se contemplan para los materiales electorales está el uso de urnas totalmente transparentes y no sólo con ventanas como hasta ahora.
Asimismo se propone crear una mochila electoral que sustituya al paquete y remplazar el marcador para emitir el voto por un lápiz de color negro con menos cera que sería más resistente a las condiciones climáticas donde el calor provoca que se reblandezca el material.
Los materiales definitivos deberán ser sometidos, en su oportunidad, a consideración del Consejo General del IFE quien avalará su uso en 2009.
En el caso del cancel electoral se exploran al menos tres alternativas y en todas ellas se garantiza la secrecía del voto. En la primera, basada en el modelo anterior, la modificación consiste en acortar los laterales y quitar las cortinas que ocultaban al votante.
Los encargados del diseño han comprobado que el propio cuerpo del votante funciona como barrera para impedir que una persona, desde el exterior, pueda ver por quién votó o qué hace con la boleta. Este modelo representa una pequeña reducción en el costo del material.
Otra propuesta, también basada en la misma superficie, utiliza un material parecido a la mampara que se usa para las personas que acuden a votar en silla de ruedas o tienen baja estatura.
En cuanto a la tercera opción, emplearía la mampara especial del proceso anterior y se complementaría con una mesa y sillas, sería muy fácil de armar pues tiene menos piezas que las otras y reduciría el costo, pues no se inyectaría el plástico de la base ni se harían tubos de aluminio.
"El alquiler de una mesa junto con sus sillas nos cuesta entre 30 y 40 pesos por un día y el costo de esos materiales sería similar al de la mampara especial. Este producto comparado con el que se usa actualmente tendría una diferencia de 50 por ciento menos en costo", establece el informe.
El IFE también contempla recuperar entre 75 y 80 por ciento de los canceles utilizados en 2006, lo que propiciaría que sólo fuera necesario producir unos 50 mil productos de cualquiera de dichos modelos.
Posteriormente se sustituirían esos artículos a lo largo de dos o tres procesos electorales al juntar distritos completos con materiales reutilizables y se dotaría a otros de nuevos.
Con relación a la urna electoral la propuesta consiste en hacerla completamente transparente, con un material más ligero y económico, fácil de estibar, con menos volumen e impresas por dentro con un color específico que identifique el tipo de elección.
El proceso de producción de esas urnas sería más rápido ya que sólo requeriría dos flejes, poner los letreros y engraparlos. En el caso del modelo anterior había que pegar las cuatro ventanillas, era un proceso largo y se desperdiciaba más material, según el informe.
Otro artículo del cual se pretende cambiar el diseño es la caja paquete electoral, cuyo volumen podía albergar material de hasta tres elecciones diferentes y que hasta 2006 debía ser desechada por completo una vez concluido su uso.
El IFE considera para 2009 usar una mochila que nombraría "Mochila Paquete Electoral" que contiene el sobre del Programa de Resultados Electorales Preliminares (PREP) que va por fuera, el documento que se lee la noche de los comicios y la otra copia del acta electoral.
Por dentro tendría dos compartimentos para poder separar los documentos que no sean boletas electorales (como marca la nueva ley), para atender los requerimientos legales, y en el otro irían las boletas.