Realizan ofensiva contra presuntos militantes de Hamas y Yihad Islámica.
El Ejército de Israel lanzó ayer una nueva ofensiva armada en la franja de Gaza contra presuntos militantes de los grupos extremistas palestinos Hamas y Yihad Islámica, con saldo de siete muertos y 18 heridos.
Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) allanaron un edificio donde residían dos milicianos de la Yihad Islámica, luego que un cohete de fabricación casera alcanzara ayer la localidad israelí de Ashkelon, a unos 15 kilómetros de la frontera con Gaza.
Después del lanzamiento, Israel ordenó la incursión durante la cual un tanque israelí ingresó en una zona al sur de la ciudad de Gaza y atacó un edificio donde se refugiaban dos activistas de la Yihad Islámica identificados como Ahmad y Sami Fallad, de 22 y 25 años.
Como consecuencia del ataque, ambos militantes, la madre y hermana de uno de ellos murieron, así como otras tres personas, de acuerdo con fuentes médicas citadas por el diario israelí Haaretz en su página Web.
Milicianos del Frente Popular para la Liberación de Palestina-Comando General (FPLP-CG), cuyo líder es Ahmed Yibril, se atribuyeron el disparo del cohete casero desde Gaza contra territorio israelí.
Además, cazabombarderos F-16 de la Fuerza Aérea israelí destruyeron las viviendas de otros dos milicianos de la Yihad Islámica en Gaza, muertos hace dos semanas, aunque no hubo heridos porque estaban vacías en el momento del ataque.
En Cisjordania, fuentes policiales palestinas informaron de una amplia incursión de las tropas israelíes con carros blindados y vehículos todoterreno en el centro de la ciudad de Naplusa, con un saldo de unos 20 palestinos heridos.
Entre los heridos se encuentra un menor de 10 años y cuatro milicianos de las Brigadas de los Mártires de Al Aqsa, según fuentes médicas de la ciudad, que precisaron que muchos de los lesionados recibieron disparos de balas de acero recubiertas de caucho.
Reitera Olmert promesa de frenar construcción de colonias
El primer ministro israelí Ehud Olmert reiteró ayer su promesa de frenar la construcción de nuevas colonias judías en Cisjordania y evitar futuras apropiaciones de tierra, a una semana de la visita a Israel del presidente George W. Bush.
Olmert viajó ayer a Jordania, a un día de que el rey Abdalá II se reuniera en El Cairo con el presidente egipcio Hosni Mubarak y el palestino Mahmoud Abbas, para discutir el desarrollo del proceso de paz desde la cumbre de Annapolis, hace poco más de un mes.
“Los esfuerzos desplegados por Jordania para sostener el proceso de paz entre los palestinos e Israel fueron el tema principal de la entrevista de Olmert con el rey Abdalá”, informó un vocero del palacio real.
Durante su encuentro en la ciudad jordana de Aqaba, en el Mar Rojo, el monarca instó a Olmert a abstenerse de emprender “acciones unilaterales”, tras expresar el rechazo de Ammán a los asentamientos israelíes levantados en los territorios palestinos.
Según la agencia jordana de noticias Petra, el rey Abdalá II insistió en que las construcciones suponen una “clara violación’ de lo que se acordó en la Conferencia Internacional de Paz para Oriente Medio, en la ciudad estadounidense de Annapolis, cerca de Washington.