Las mujeres sexualmente activas y en la etapa productiva son las más vulnerables a padecer una infección urinaria.
Las personas sexualmente activas y en etapa laboral productiva tienen un mayor riesgo de contraer los males.
Las mujeres sexualmente activas y que están en una etapa laboral productiva, tienen un mayor riesgo de sufrir infecciones urinarias o vaginales, con todas las repercusiones que esto conlleva en la calidad de vida, el desarrollo profesional y familiar, económico y social.
La Secretaría de Salud informó a este respecto que casi la mitad de las mujeres en promedio, sufre de alguna de estas infecciones en algún momento de su vida, lo que también tiene consecuencias en cuanto a los días perdidos por incapacidades laborales.
Se indicó que las infecciones urinarias son muy frecuentes en México, sobre todo en mujeres, pues se estima que entre el 50 y el 80 por ciento de las mexicanas las padecerán en alguna etapa de su vida.
Sin embargo, su desarrollo depende de la higiene que se tenga en el área genital, por lo que tanto las niñas, jóvenes, personas adultas y de la tercera edad pueden tener una infección de este tipo en cualquier momento.
No obstante, el riesgo incrementa cuando inician la vida sexual, ya que se facilita la producción de algunas bacterias.
Se indicó que de acuerdo con el Atlas Bacteriológico editado por la Academia Nacional de Medicina, alrededor del 25 por ciento de las mujeres con un episodio de infección urinaria puede presentar infecciones recurrentes debido a una recaída o reinfección.
Por ello, se debe tener una buena higiene íntima y acudir al especialista desde los primeros síntomas.
Entre los signos que alertan sobre el padecimiento de una infección están el dolor en la parte baja del abdomen, ardor al momento de orinar, aumento en el número de micciones (expulsiones de la orina), sensación de no haber terminado de orinar, fiebres sin motivo aparente y, en ocasiones, sangre en la orina.
Cuando se presentan estos síntomas, la persona debe acudir al especialista, debido a que las bacterias han invadido las vías urinarias y si no se atiende a tiempo, pueden ocasionar problemas más serios en la salud de quien las padece.
En cuanto al tratamiento para las infecciones urinarias, se indicó que lo ideal son los antibióticos y los más efectivos son los de nueva generación conocidos como fluoroquinolonas, que tienen mayor grado de eficacia para su erradicación por su mecanismo de acción y altas concentraciones que alcanzan en la orina.
El tratamiento es de siete a 14 días, según el tipo de medicamento que se recete y la gravedad de la infección.
Como dato adicional, la bacteria Escherichia coli (E.coli) es la causante hasta en 90 por ciento de los casos de este tipo de infecciones, debido a que habita normalmente en el intestino grueso y por su cercanía anatómica, llega con facilidad a las vías urinarias de la mujer.
Por otra parte, existe un alto porcentaje de coinfección, es decir, si padece una de tipo vaginal, tiene alta probabilidad de desarrollar una de tipo urinaria.
Para evitarlas, se recomienda a las mujeres no usar ropa interior sintética, tener una buena higiene íntima y no retrasar la micción.
Síntomas
Entre los signos que alertan sobre el padecimiento de una infección urinaria figuran:
· Dolor en la parte baja del abdomen.
· Ardor al momento de orinar.
· Aumento en el número de micciones (expulsiones de la orina).
· Sensación de no haber terminado de orinar.
· Fiebres sin motivo aparente.
· En ocasiones, sangrado en la orina.
FUENTE: Secretaría de Salud
