Los estados de Sinaloa -el más violento en 2007-, Michoacán y Baja California registran las primeras ejecuciones del año.
En la entidad sinaloense, cuatro personas fueron asesinadas por disparos de arma de fuego, una de ellas, Jesús Rosario González Higuera, vecino de la colonia la Piedra, en la ciudad de Guamúchil, se presume que fue alcanzado por una bala, mas se ignora si se trató de un proyectil perdido o fue una ejecución.
En la comunidad Tultita, de Guamúchil, se localizó el cuerpo de Gabriel Guzmán Pérez, con nueve lesiones de calibre .38 súper.
Y en el poblado de Pueblos Unidos, de Culiacán, en el interior de un vehículo fueron hallados ejecutados los hermanos Eleazar y Eduardo Gurrola Barraza, de 14 y 18 años de edad.
En Michoacán dos hombres fueron asesinados.
En Lázaro Cárdenas, Omar Pérez Barrera, fue localizado con un impacto de bala en el rostro. Y en las márgenes del río que bordea la comunidad de La Pastoría, en La Huacana, fue hallado el cuerpo de un individuo estrangulado.
En tanto, dos crímenes más ocurrieron en Tijuana, Baja California. Uno de los cuerpos estaba envuelto en una cobija y mostraba huellas de estrangulamiento; tenía un paquete que simulaba ser marihuana entre las manos, sin que se confirmara su identidad.
Aunque las autoridades aseguran que no se ha confirmado la identidad del fallecido, extraoficialmente circuló la versión de que se trata del jefe policiaco Jesús Rodríguez Meraz, quien fue privado de la libertad por un comando armado que allanó su domicilio el 31 de diciembre pasado.
Cabe mencionar que junto a Rodríguez Meraz fue privado de la libertad un hombre a quien se identificó como su familiar político y cuyo paradero tampoco se ha dado a conocer.
El secretario de Seguridad Pública Municipal, Jesús Alberto Capella Ibarra, confirmó que las investigaciones sobre estos “levantones” fueron atraídas por la Procuraduría General de la República (PGR), dado que se ha confirmado que hay delitos del cuerpo federal en los que no descartó la participación del elemento policiaco.
Un segundo cadáver con varios disparos en la cabeza fue localizado en la presa Abelardo L. Rodríguez, ubicada en la salida a Tecate.
Mientras, en una tienda de Guadalupe y Calvo, Nuevo León, Javier Garza Ornelas fue asesinado de cuatro impactos de bala. Alejandro Garza y Garza, subprocurador de Ministerios Públicos, informó que los sicarios portaban dos pistolas calibre .38 súper, y que ese tipo de armas no es utilizada por la delincuencia organizada, por lo que se maneja como un asalto.
