Los 14 paramilitares colombianos extraditados a Estados Unidos comenzaron ayer a comparecer ante tribunales federales, donde enfrentan acusaciones de narcotráfico que podrían mantenerlos presos durante años.
Sin embargo, no podrán ser condenados a cadena perpetua debido al acuerdo de extradición sellado entre los gobiernos de Colombia y Estados Unidos.
En Miami, Ramiro Vanoy Murillo y Francisco Zuluaga Lindo se presentaron ante el juez William Turnoff, que les notificó cuáles son las acusaciones por presunto narcotráfico que enfrentan y les fijó una nueva audiencia para el 4 de junio.
Vestidos con pantalón y camisa de color marrón claro y con grilletes en las muñecas y los tobillos, Vanoy Murillo y Zuluaga Lindo sólo se identificaron con nombre y apellido ante el juez y le dijeron su edad. Ninguno de los dos paramilitares colombianos presentó sus alegatos en la audiencia preliminar.
Los fiscales y el abogado defensor de los colombianos, Dennis Urbano, le informaron al magistrado que habían acordado que Vanoy Murillo, de 60 años, y Zuluaga Lindo, de 38, permanezcan detenidos sin derecho a fianza mientras esperan el inicio del juicio por acusaciones relacionadas con el narcotráfico.
Ambos continuarán presos en una cárcel federal del centro de Miami.
Vanoy Murillo y Zuluaga Lindo forman parte del grupo de 14 miembros de las Autodefensas Unidas de Colombia extraditados el martes a Estados Unidos para que enfrenten cargos de narcotráfico. Los 12 restantes comparecerán ante los jueces federales de los distritos en los que enfrentan acusaciones, que además de la Florida incluyen a Washington, Nueva York y Texas, informó el Departamento de Justicia.
En Nueva York, un juez federal ordenó prolongar la detención del ex jefe paramilitar Diego Murillo, alias “Don Berna”, sin derecho a fianza.
Murillo permanecía detenido dentro de una unidad especial de segregación en una prisión federal en Manhattan, reservada comúnmente a los presos que representan un alto riesgo para la seguridad.
Confiscan bienes por 25 mdd
Las autoridades ocuparon bienes valorados en 25 millones de dólares y que pertenecen a Salvatore Mancuso, un jefe paramilitar extraditado la víspera a Estados Unidos junto a otros 13 líderes de esas bandas, indicó ayer la Policía y la Fiscalía en Colombia.
Entre los bienes decomisados están al menos ocho fincas, así como un local comercial, decenas de pequeños lotes de tierras en distintas partes del país, dijo la Policía judicial Dijin en un comunicado.
La Dijin ha explicado que viene desde hace meses siguiendo la pista sobre distintos activos en manos del ex jefe paramilitar y sólo hasta ahora pudo junto a la Fiscalía tener evidencias y órdenes para realizar las ocupaciones.
Mancuso, quien se entregó a las autoridades como parte de un proceso de desmovilización de bandas paramilitares iniciado por el Gobierno en 2003, ha sido señalado por al menos 500 personas de ser responsable de crímenes atroces como desapariciones, señaló la Fiscalía.