Por variados factores, la época decembrina ha sido por muchos años, un tiempo en que la depresión invade a un gran número de personas. Es un sentimiento que se origina por situaciones que tienen que ver con el amor, la amistad, la solidaridad y la economía.
En la Dirección de Salud y Asistencia Social, a cargo de Rocío Idalia Reyes Burciaga, informaron que es un mal que afecta más a las personas del medio urbano que del rural y es por el “bombardeo” de incitación al consumo y valores morales que atacan negativamente a quien carece de empleo, dinero y se siente solo por la pérdida de un ser querido.
Reyes Burciaga expresó que en diciembre, la depresión se eleva por fuentes que tienen que ver con lo económico y lo laboral que se unen a las de tipo emocional. La depresión navideña es un estado anímico que no registra demasiada diferencia de lo que se conoce como depresión común. Es más la tristeza y la melancolía donde el pesimismo se agravan por la carga sentimental que suele rodear a estas fiestas.
Incluso, la funcionario refirió que diferentes estudios han llegado a la conclusión de que en esta época del año, teóricamente marcada por la felicidad y la ilusión, los casos de descensos anímicos y de suicidios aumentan hasta un 40 por ciento.