Las autoridades deben investigar a todos los policías que participaron en el cateo a la “narcomansión” del Desierto de los Leones y a los superiores del ex comisionado de la Policía Federal Preventiva, Gerardo Garay, consideraron ayer líderes ciudadanos.
José Antonio Ortega, presidente del Consejo Ciudadano de Seguridad Pública y Justicia Penal, señaló que el ataque a la corrupción va a quedar incompleto si la investigación se agota en Garay, su jefe de operaciones especiales, Francisco Navarro, y en dos agentes, quienes ya están en prisión.
“Si esto no pasa (que se investigue a todos), la Operación Limpieza no surte los efectos que desea toda la sociedad y que son sentar un escarmiento muy grave para que esto no vuelva a pasar.
“Si esto no sucede y hay autorización, contubernio y beneficios de mandos más arriba de Garay, lo único que va a pasar es que unos irán a prisión, pero son sustituidos por otros y las acciones de corrupción y de contubernio seguirán haciéndose, porque no tocarían a los verdaderos patrones de esa corrupción”, argumentó.
Elías Kuri, quien es integrante de la agrupación Iluminemos México, indicó que por acciones como la cometida en la casa del Desierto de los Leones, la ciudadanía no confía en las corporaciones policíacas.
“El problema es que de repente ya no sabemos dónde está la línea divisoria entre la Policía y la delincuencia, porque si tú ves el operativo te preguntas hasta dónde eran policías o realmente son delincuentes, porque actúan como si fueran lo mismo”, apuntó.
Ayer se reveló que según la averiguación previa PGR/SIEDO/359/2008, durante la detención de un grupo de colombianos, Garay se aprovechó presuntamente de cuatro prostitutas que fueron detenidas, consintió el robo de medio millón de dólares, joyas y hasta de un perro que se encontraba en la casa, el pasado 16 de octubre.
María Elena Morera, presidenta de México Unido Contra la Delincuencia, dijo que este tipo de acciones indigna a la sociedad y celebró que ya exista un proceso penal para castigar a los presuntos responsables.
“Los ciudadanos nos quedamos con una sensación de indefensión, porque si esa gente es la que está deteniendo, tú tienes la probabilidad de que te hagan cosas como las que se publicaron, me parece terrible”, dijo.
