Ramírez, aprovechó su estadía en Guadalajara para visitar al Atlas. (El Universal)
Jesús Ramírez anhela que la tormenta que azotó a la Selección Nacional durante los más recientes meses no lo alcance... Y sabe que la única manera de acabarla es con un buen debut al frente del Tricolor.
Eso explica lo juvenil que será el plantel que convocará para enfrentar a China, en Seattle, el próximo miércoles, en lo que será su presentación como técnico nacional.
“No vamos a tener mucho tiempo para trabajar, solamente dos sesiones, por lo que tiene que ser un equipo equilibrado, con relación a lo que —más o menos— he manejado, con características de los jugadores para que se pueda hacer eso y que se adapten rápidamente a este sistema”, apunta el estratega interino del Tricolor.
La premura del primer cotejo obliga a no correr riesgos, a meditar muy bien la convocatoria.
Aunque reitera que todos los jugadores mexicanos están contemplados, el entrenador campeón del mundo Sub-17 en 2005 deja entrever que la base de la Selección —al menos para el duelo contra los asiáticos— será conformada por elementos con los que ya ha trabajado y a los que conoce a la perfección.
“En algunos aspectos puede ser que sí, pero la Selección, como siempre lo he dicho, está abierta para quien quiera estar en ésta y se lo merezca, gracias a su entrega y rendimiento en la cancha”, subraya.
Por lo pronto, Ramírez aprovecha su estadía en Guadalajara para visitar al Atlas, uno de los clubes que aportará más elementos en su primera lista.
No obstante, recuerda que ya ha charlado con varios directores técnicos de la Primera División, porque el objetivo es tener canal abierto con los 18 clubes que la conforman, esto con la finalidad de facilitar el trabajo del equipo nacional en las concentraciones que están por venir.
“Regreso a México, prácticamente para delinear la lista”, revela. “Ya estuve con El Tuca Ferretti, (Sergio) Markarián… En la medida que nos dé tiempo, trataré de estar con la mayoría”.
“Esta comunicación ha sido muy importante, lo he platicado con Justino Compeán, con Decio (De María), con Memo Cantú, y la verdad es que estuvieron muy contentos de que esto se hiciera”, agrega orgulloso.
“Ya la hemos tenido, quizá no tan visible, porque son selecciones juveniles, y nos nutre mucho, porque escuchar comentarios de la gente que está al frente de los clubes es importante”.
Por lo pronto, lo único seguro parece ser que no habrá elementos del América, ya que el jueves de la próxima semana define su futuro dentro de la Copa Libertadores, al visitar a la Universidad Católica de Chile.
“Ya tuve una comunicación con (Pedro) Portilla, Yon (de Luisa) y el señor (Guillermo) Cañedo”, revela. “Aprovechamos el partido de América-Pachuca, en el que estuve con ellos”.
Y es que, el estratega nacional no quiere dar pie a las confusiones. Por eso, ha visitado varios clubes, tal como lo hizo ayer con el Atlas, en donde se encontró y platicó con Andrés Guardado, quien se recupera de la rotura fibrilar que padece.
“Hay mucho por hacer y estamos en la mejor disposición para rendir buenas cuentas”, asegura.
