Alberto Cárdenas justificó el hecho de que funcionarios revciban el Procampo, al ser entrevistado en el marco de la segunda reunión ordinaria del Consejo Estatal de Desarrollo Rural Sustentable.
En el discurso que emitió Alberto Cárdenas Jiménez, secretario de Agricultura, Ganadería, Deasarrollo Rural Pesca y Alimentación (Sagarpa), resaltó que los programas deben ir dirigidos a los estratos más pobres, mientras que en entrevista con los medios de comunicación, dijo que no tiene nada de malo que los servidores públicos cobren el Procampo.
Lo anterior, luego de la referencia que se le hizo de que Rubén Escajeda Jiménez, diputado federal por Durango, y el ex funcionario Rómulo Campuzano eran beneficiarios de este programa supuestamente destinado al sector social.
A su conciencia.
Al ser cuestionado con relación al empleo de recursos para la producción de droga reiteró que el fin de la Sagarpa es apoyar para la producción de alimentos y que si el dinero se empleaba mal “tarde que temprano les llegará su santo”, posiblemente tratando de citar el refrán que versa “a cada santo le llega su hora”.
Cárdenas Jiménez en su discurso resaltó los logros de los cambios en las reglas de operación en el manejo de programas, diciendo que una gran parte de la fricción que se ha tenido es porque el gobierno central desde la Sagarpa forzó a orientar mejor los presupuestos.
“Propusimos la estratificación de beneficiarios para que se invirtieran más recursos en los más pobres y que si había quienes tenían cinco años recibiendo el recurso, esperarán a que se apoyara primero a los nuevos”, indicó.
“Casi la mitad de los estados de la República pidió que se pusiera en práctica dicha variante, eso porque era muy duro invertir, pues mientras que algunos están muy necesitados, hay gente que requiere de menos apoyos o casi nada”.
También necesitan.
Por otra parte, dijo que hay legisladores que de tiempo atrás han trabajado en el campo, teniendo cierto tipo de apoyos y ahora mantienen su actividad y la ayuda les quedó, “yo creo que no es ilícito”.
Subrayó que en el caso de las personas citadas no es malo que se siga pagando el procampo después de varios años, aun y cuando se llega a tener algún cargo público.
Destacó que lo que en reglas está como una prohibición absoluta fue que los funcionarios federales y estatales de primer orden, es decir los que toman las decisiones, no se aprovecharan del cargo para autorizarse proyectos, pero en el caso del Procampo es un programa que se entrega desde hace 15 años y está llegando a su fin.
Además refirió que los apoyos que tienen son para que se produzcan más alimentos y así como hay empresarios de todos los sectores que se dedican a ello, puede haber políticos “y por supuesto que los hay”, ellos también trabajan en el campo.
También debe haber quienes reciban ayuda de subsidio para el diesel, otros para la pesca y mientras no se desvié el recurso para el que los programas fueron establecidos todo está bien. Agregó que las nuevas reglas de operación han distribuido mucho mejor el recurso para el campo.
Datos
Alberto Cárdenas Jiménez en su discurso resaltó los logros de los cambios en las reglas de operación en el manejo de programas de la Sagarpa.
El funcionario federal dijo que hay legisladores que de tiempo atrás han trabajado en el campo, teniendo cierto tipo de apoyos y la ayuda les quedó.
El Secretario dijo que también debe haber quienes reciban ayuda de subsidio para el diesel, otros para la pesca y mientras no se desvié el recurso.