Cuando creo, muchas veces que como veterinario ya he aprendido suficiente sobre la conducta y aptitudes de los animales, la vida me da lecciones de humildad haciéndome ver que no he aprendido nada.
Para ejemplificar lo anterior, les platico de tres casos que se antojan hasta curiosos, y que me acabo de enterar de ellos este mes.
Una señora de aproximadamente 60 años viuda que vive sola, pues sus hijos ya se casaron, se encontró “tirado” un gatito gris muy pequeño con los ojos cerrados, y dice que se dio cuenta que estaba entre unos arbustos camino a su casa, pues éste maullaba con fuerza, y al localizarlo y recogerlo vio que estaba mojado, lo llevó a su casa lo secó lo alimentó y se dijo lo voy a tener mientras éste pueda valerse por sí mismo y después lo regaló. El gato por supuesta nunca se fue de la casa, ahorita tiene aproximadamente tres años, y lo curioso es que sigue a la señora a todos lados como si fuera un perro faldero, me platica la señora que el gato la acompaña cuando va a comprar algo a la tienda, y se espera afuera para acompañarla de regreso siempre a un lado de ella, lo mismo pasa cuando voy a caminar por las mañanas, o cuando voy a visitar a un vecino, al grado de que ahora le puse un collar y una cadena para tener un mejor control sobre él, al igual que si fuera un perro.
Otro caso es el de un perro pastor alemán que dejan salir de su casa por las tardes, como a las 5:00 p.m., el perro va directamente a la tienda de la esquina, se para en la puerta y ladra y el propietario de la tienda le avienta un pan para que éste se lo coma acto seguido el perro se regresa a su casa. Al cabo de una semana le pasa la cuenta de los panes consumidos por el lobo a sus dueños.
Otro ejemplo, ocurre en mi casa, con una tortuga de río que me regalaron herida y que en la actualidad cuenta con aproximadamente ocho años, esta tortuga ya casi no quiere estar en el agua excepto para comer, y sigue por toda la casa a mi esposa, quien es la que la alimenta y platica con ella, rasca la puerta para salir al jardín cuando así lo desea y rasca de nuevo para entrar, en tiempo de frió, o cuando está fresco, se mete a la casa de nuestra perrita chihuahua “Fey” y ahí se queda por mucho tiempo aprovechando el calor.
Yo erróneamente creí que algún tipo de animales no tenía suficiente inteligencia, sino que más bien eran hábitos e instintos.
Ahora sé que a mí me falta inteligencia para aprender todo lo que a diario me enseñan y en el futuro quisiera aprender de ellos.
Y ahora para terminar una gota de filosofía.
A los enemigos dales la cara.
A los que te halaguen dales la espalda.
Pues el que acepta los halagos, empieza a ser dominado.
Al caballo lo acariciamos antes de montarlo (Facundo Cabral).
ADÓPTANOS
El Güero Barraza y Chabela, buscamos una familia que nos adopte, nos quiera y nos cuide. Somos amigables, buenos compañeros, excelente compañía.
El Güero Barraza: Macho, (izquierda), samoyedo, tres años, una vacuna aplicada, esterilizado, soy noble, tranquilo y cariñoso.
Chabela: Hembra (derecha), dos meses, cruza de cocker, una vacuna aplicada, soy simpático, juguetona, y tierna como todos los cachorros.
Anímate no lo pienses más, adopta un amigo leal e incondicional sin costo alguno, sólo envíanos un correo a:
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No olvides llevar al día el esquema de vacunación de tu mascota. Identifícala con una placa que contenga información básica en caso de extravío, no permitas que se convierta en una estadística más de muerte en la calle. Si por alguna razón tienes una mascota no deseada no la abandones en la calle, no la condenes a muerte si ésta no logra encontrar un lugar seguro donde no la agredan, donde pueda protegerse del calor, y donde pueda encontrar agua y alimento. Demos el ejemplo a nuestros hijos, tomemos decisiones responsables.
