El presidente Felipe Calderón acusó que en anteriores administraciones no se invertía en carreteras por corrupción y falta de dinero, esto al poner en marcha un tramo del Arco Norte, que pasa por Michoacán. (Notimex)
Destaca el mandatario que en este año la inversión en infraestructura aumentará 100 mil mdp.
La corrupción, la ineficiencia o la falta de dinero, obstruyeron la construcción de obras públicas en el país, acusó el presidente Felipe Calderón durante una gira de trabajo ayer por Tlaxcala.
El mandatario, quien lució de buen humor y hasta bromeó con los asistentes a los dos actos que encabezó, puso en marcha un tramo del llamado Arco Norte, carretera con la cual se pretende evitar el paso de mercancía o viajantes, por el Distrito Federal a fin de agilizar su tránsito.
Poco antes de manejar unos minutos la misma camioneta blindada en la que viaja -para inaugurar el tramo Sanctórum-San Martín Texmelucan-, el mandatario hizo alusión al esquema de financiamiento para la construcción de estas vías:
“Y otra buena noticia es el esquema que estamos siguiendo, siempre nos detenía la falta de dinero, a veces la ineficiencia y a veces la corrupción, hay que decirlo, para sacar adelante obras públicas en México”.
Precisamente, a un día de que se cumpla el segundo aniversario del arranque de su campaña presidencial, Calderón recordó su lema y lo mencionó durante el acto, “manos limpias”:
“Hoy estamos poniéndole solución a las tres cosas, estamos encabezando un Gobierno con honestidad, un Gobierno de manos limpias para trabajar en beneficio de la gente”.
El titular del Ejecutivo, quien recibió porras de los habitantes de comunidades cercanas traídos al lugar, informó que gracias a la reforma hacendaria y a los legisladores la inversión en infraestructura aumentará en 2008, en 100 mil millones de pesos, por ello se espera una inversión total, contando los recursos de la Iniciativa Privada, de 500 mil millones de pesos.
“Obviamente la inversión no sólo será carretera, la diversificaremos en carreteras, puertos, aeropuertos, vías férreas, telecomunicaciones, plantas regasificadoras, proyectos energéticos, proyectos eléctricos, reinversiones adicionales en Pemex, muchas, muchas cosas más”, dijo.
Árboles contra la pobreza
Más tarde, se dirigió al municipio de Tlaxco en donde recibió las primeras solicitudes del programa Proárbol para 2008. Ahí citó al escritor José Saramago y aseguró que los árboles “son compañeros indispensables en el andar de la humanidad”.
Al informar que se aumentarán mil 600 millones de pesos a este programa a fin de alcanzar la suma total de cinco mil 200 millones de pesos para este año, Calderón aseguró que la política de sembrar y cuidar árboles “no es para nosotros una mera política de ornato, es una política pública, es una política social, es una política que rinde frutos, es una política económica, es una política de combate a la pobreza, es una política de rescate de la naturaleza”.
Por ello se comprometió a que se sembrarán dos millones 800 mil árboles este año.