El incremento en el costo de los materiales ocasiona que la gente se limite en la construcción, por lo que muchos albañiles están sin trabajo.
SITUACIÓN
Los albañiles no encuentran trabajo.
Durango. “La crisis nos pega a todos”, platicó Miguel Salas Herrera mientras partía un ladrillo con la cuchara. Sus palabras dejan de manifiesto que los estragos no distinguen de clases sociales, pues lo mismo causa impactos en profesionistas y empresarios que en los obreros que se ganan el dinero diariamente bajo los rayos del sol, entre polvo y el cemento.
Cada semana llegan. Miguel es albañil desde hace 25 años, actualmente se encuentra construyendo una propiedad en la Zona Centro y se considera afortunado por tener trabajo desde octubre del 2007, pero hay colegas que no han tenido la misma suerte. “Cada semana vienen aquí albañiles para pedirme trabajo y pues yo les digo que no hay”, narró; añadió que los comentarios generalizados de quienes le piden “jale” son que no encuentran por ningún lado y siguen desempleados.
Con lo justo. El “maistro” recibe mil 300 pesos por semana como pago por la obra que actualmente realiza, tiene a su cargo tres “chalanes” que perciben 700 pesos; las condiciones actuales le permiten mantener a sus dos hijos estudiando la primaria, darle a su esposa para los gastos “y todavía me queda para echarme una caguama”, dice vivir con lo justo. Pero reconoció que la situación no es igual para todos, pues actualmente la gente ya no quiere construir por el encarecimiento en el costo de los materiales y prefiere cuidar su dinero, a pesar de que el costo de la “mano de obra” sigue siendo el mismo desde el año pasado.
Se los pasa a otros. “Me han salido otras obras pero yo estoy ocupado en ésta, yo lo que hago es recomendarles a otros albañiles que están desempleados”, agregó que espera que al finalizar la obra que realiza pueda seguir trabajando, pues cuenta con la ventaja de tener varios “patrones” y proyectos en puerta.
Juan Manuel Cárdenas
El Siglo de Durango
Miguel Salas Herrera
Albañil
“Cada semana vienen aquí albañiles para pedirme trabajo y pues yo les digo que no hay; dicen que no hay trabajo y están desempleados”.
