Las remesas de los migrantes sostienen a las familias del campo, las cuales en su mayoría son de ancianos.
Los campesinos emigran y viven de remesas.
Durango. El estado dejó de ser productor, exportador de productos del campo, lo que ha causado la globalización de este sector que facilitó a grandes empresas transnacionales apoderarse de la mano de obra y recursos naturales en México.
Así lo indicó Edmundo Castellanos Pérez, director de la Facultad de Agronomía y Zootecnia (FAZ) de la Universidad Juárez, durante su participación en el foro “La Crisis Alimentaria en México”, quien presentó “La Globalización y el Sector Campesino en el Estado de Durango”.
Estudios. Respecto al estado actual del campesino duranguense, explicó que poco más de 158 mil cabezas de ganado de propiedad privada integran más del 50 por ciento en el territorio, de este total en los ejidos 62.1 por ciento es corriente, 9.3 por ciento ganado fino y 28.6 por ciento ganado cruzado.
En 682 ejidos y comunidades se ha dado compraventa de tierra, donde en 349 se hicieron con avecindados y posesionarios, en 340 con personas ajenas al ejido, según el INEGI. Los recursos que envían los migrantes a los municipios de San Juan de Guadalupe y Simón Bolívar representan del 27 por ciento al 73 por ciento. En San Luis del Cordero el 55 por ciento de los hogares tiene familiares trabajando en Estados Unidos, de estos migrantes el 12 por ciento trabaja por temporadas y el 88 por ciento se queda permanentemente a residir.
