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México, DF.- Los países que incrementan sus niveles de libertad económica y limitan la intervención del gobierno experimentan tasas más altas de crecimiento y bienestar, asegura la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).
“Los gobiernos que garantizan la propiedad privada, el cumplimiento de reglas básicas de convivencia económica y permiten a sus ciudadanos decidir dónde invertir, qué consumir y cuánto producir, propician el crecimiento y la generación de oportunidades de desarrollo”.
En cambio, continúa, los países que mantienen en la represión económica a las personas terminan por asfixiar la actividad económica, inhibiendo el progreso.
En el informe semanal de su Vocería, la dependencia refiere que en días pasados The Heritage Foundation, en colaboración con The Wall Street Journal, dio a conocer su informe anual sobre la libertad económica en el mundo en su versión 2008.
Se trata, dijo, del famoso Indice de Libertad Económica (ILE) que demuestra cuán estrecha es la relación que existe entre la libertad que tienen los agentes económicos y el bienestar.
El ILE 2008 ubicó a México en el lugar 44, con un grado de libertad económica de 66.4, ligeramente mayor a su calificación del año pasado, con lo cual la economía mexicana ocupa la novena posición entre las 29 del continente americano analizadas.
De esta forma, su puntaje fue mayor al promedio de la región de América (61.6) y al promedio mundial, gracias a que el país goza de mayores niveles de libertad comercial, es decir, las operaciones comienzan a agilizarse, señala la SHCP.
Según el ILE, México goza también de libertad fiscal, ya que descendió la tasa del Impuesto Sobre la Renta; de libertad monetaria, pues la inflación es moderada, y de libertad laboral, ya que este mercado es relativamente flexible, aunado al menor tamaño del gobierno.
En contraste, dijo, empeoró la libertad de hacer negocios, ya que abrir uno toma en promedio 27 días, además de que México se colocó en el lugar 70 de 163 países analizados para el Indice de Percepción de Corrupción 2006.
En ese sentido, la SHCP enfatiza que una conclusión relevante para México que se deriva de este informe “es que las reformas estructurales que tendrán una mayor repercusión en el nivel de vida de los mexicanos son aquellas que amplíen la libertad de elección de todos los agentes económicos”.
Por ello, anota, “está en todos nosotros, los mexicanos, decidir qué tanto y qué tan rápido deseamos avanzar por la senda de una mayor libertad asociada a una mayor prosperidad”.
Para la SHCP, una de las conclusiones más poderosas que ha arrojado esta evaluación a lo largo de estos últimos 14 años, es que uno de los beneficios tangibles de vivir en una sociedad libre es el progreso material de las personas.
