Se presume que en la región de Sinaloa, Durango y Chihuahua hay campos de entrenamiento para “gatilleros”.
A la Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (SIEDO) le corresponde dar la información sobre el reclutamiento de sicarios en el estado de Durango, informó el delegado de la Procuraduría General de la República (PGR), Rafael Contreras Labra, con relación a la información publicada ayer por este medio de comunicación en la que se señala que “gatilleros” de esta entidad forman parte del Cártel de Sinaloa.
El Siglo de Durango publicó en su edición de ayer datos dados a conocer por la autoridad federal en los que se informa que tanto Durango como Chihuahua y Sinaloa son las entidades donde se reclutan sicarios para pertenecer al grupo comandado por Joaquín “El Chapo” Guzmán.
Contreras Labra afirmó que a la SIEDO le corresponde dar esa información ya que son datos que tienen qué ver con el crimen organizado. Agregó que en caso de que la citada Subprocuraduría pidiera colaboración a la delegación estatal de la PGR entonces sí intervendrían al respecto.
IDENTIFICAN ESTRATEGIA DEL NARCO
En un informe de inteligencia federal se reporta que los sicarios de “El Chapo” son reclutados entre pandilleros de San Diego y Guatemala, guardias de seguridad privada y policías, entrenados por Manuel Alejandro Aponte, identificado por la autoridad como “El Bravo”, un ex militar y jefe de seguridad de Guzmán Loera.
“El Bravo”, egresado del Colegio Militar de la generación 1993-1996, es experto en el manejo de lanzagranadas y lanzacohetes, como los asegurados en días pasados en el Distrito Federal, así como en el uso de ametralladoras M-16 y rifles R-15 y AK-47, mejor conocidos como “cuernos de chivo”.
El reporte de inteligencia señala que “El Bravo” se mueve entre Sinaloa, Durango y Chihuahua para reclutar a sus sicarios y donde presuntamente la organización tiene campos de adiestramiento, los viste con uniformes y armas similares a las del Ejército.
