Un ‘belicoso’ muy deportista Una fotografía facilitada por la cadena de televisión ARD TV muestra al presidente de Estados Unidos, George W. Bush, mientras saluda y monta en bicicleta en la ciudad de Meseberg, Alemania. Bush pedaleó alrededor de treinta minutos cerca de la casa de invitados del Gobierno alemán, donde pasará dos días. (EFE)
Pretende el presidente de EU dejar a su sucesor en el poder estructuras que ‘le faciliten la tarea’.
El presidente de Estados Unidos, George W. Bush, reconoce que la retórica empleada durante su primer mandato le hizo aparecer ante el mundo como un “tipo belicoso”.
En una entrevista que publicó ayer el diario “The Times”, Bush, que protagoniza actualmente una gira de despedida de sus aliados europeos, admite que algunas frases que utilizó en su día como “por ellos” o atraparlos “muertos o vivos” hicieron creer a muchos que “no era un hombre de paz”.
El político republicano dice que fue para él muy doloroso poner a jóvenes norteamericanos “en peligro”, enviándolos al frente, y explica que ha intentando “reunirse con todas las familias que ha podido” pues se siente obligado a “consolarlas” en la medida de sus posibilidades y “asegurar que esas vidas no se perdieron en vano”.
En relación con Irak explica que no se ha dicho lo suficiente que “se intentó explorar una vía diplomática” de resolver el conflicto, motivo por el cual, afirma, “recurrimos al Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas”. Según sus entrevistadores, el unilateralismo que marcó su primer mandato ha sido sustituido por el entusiasmo por un “enérgico multilateralismo”.
Así, Bush señala en la entrevista que en lo que le queda de Presidencia tratará de llegar a acuerdos sobre distintos asuntos como el establecimiento de un Estado palestino para “dejarle al próximo presidente ciertas estructuras que le faciliten la tarea”.
Sobre su sucesor, quienquiera que sea, Bush afirma que cuando llegue a la Casa Blanca y “vea qué funciona y qué no al tratar con Irán”, terminará siguiendo la actual política norteamericana hacia ese país.
Sobre su negativa a ratificar el protocolo de Kyoto, Bush señala que hay actualmente un reconocimiento de que los países ricos “tienen que superar la economía basada en los hidrocarburos”, pero insiste en que sin China y la India no es viable fijarse objetivos vinculantes de reducción de emisiones de CO2.
Reitera Bush amenaza de ataque militar a Irán
El presidente estadounidense George W. Bush afirmó ayer que su prioridad es resolver un estancamiento con Irán por medio de la diplomacia, pero que “todas las cartas están sobre la mesa”.
Bush reforzó la posibilidad de un ataque militar a Irán, aun como último recurso, durante una conferencia de prensa con la canciller federal alemana Angela Merkel. Advirtió que un Irán con armas nucleares sería una amenaza a la paz mundial y está presionando a los aliados europeos para que apoyen sanciones.
“Dije a la canciller que mi primera opción, por supuesto, es solucionar esto diplomáticamente”, dijo Bush, pero agregó que “todas las cartas están sobre la mesa”.
Merkel dijo por su parte que si Irán no accede a suspender su programa de enriquecimiento de uranio, se necesitarán sanciones adicionales.
“La oferta a Irán está sobre la mesa, pero si no cumple sus compromisos, entonces harán falta nuevas sanciones”, agregó.
Los europeos quieren esperar antes de aplicar sanciones más severas hasta que el jefe de la diplomacia de la Unión Europea, Javier Solana, visite Teherán con un paquete de incentivos a cambio de que Irán detenga su programa de enriquecimiento.
Mientras tienen lugar las presiones diplomáticas, el presidente iraní Mahmoud Ahmadinayad dijo ayer que la era de Bush “toca a su fin” y que ha fracasado en sus objetivos de atacar Irán y detener su programa nuclear.
Ahmadinayad dijo que las presiones y sanciones no lograrán obligar a Irán a detener su programa de enriquecimiento de uranio. “Si el enemigo cree que puede doblegar a la nación iraní con presiones, está equivocado”, sentenció.