La pequeña porra de los Indios de Ciudad Juárez mejor prendió una llamarada en las tribunas, ya que su equipo no se encendia en la cancha. (Fotografía de Ramón Sotomayor Covarrubias)
"Está mejor esta hora, porque hace menos calor", comentó un aficionado antes de entrar al estadio y mucho antes que el bochorno tomara parte del juego.
Primera vez que Guerreros e Indios se veían las caras en Primera División, un duelo que puede ser clásico siempre y cuando la fortuna de los de Ciudad Juárez cambie.
Salen los jugadores de Santos que se solidarizan con Carlos Sánchez. Hay confianza en que los de casa saquen la victoria, pero algunos aficionados por ser un horario diferente aún no se acostumbran.
De lo más interesante del primer tiempo fue el arribo de la lluvia, que refrescó a la gente de Sol Plateas, mientras que en Sombra a algunos molestó, otros decidieron subir a cubrirse.
Pero así como llegó el agua así se fue, y al igual Santos jugó muy bien al elaborar una jugada que fue el gol de Benítez y también así se fue.
Los Indios mantienen su equipo ordenado, se acerca a la portería albiverde, el infortunio es su mayor enemigo, al grado que tuvo cuatro jugadas claras para anotar y ninguna se metió a las redes.
El árbitro se ve verde y no sólo por el uniforme, sino en algunas de sus marcaciones, pero en especial a la hora de sacar la tarjeta.
En medio tiempo las Guerreritas iniciaron su baile con jazz, swing y zamba, alguna podría ser naturalizada carioca, por la forma de mover las piernas y lo demás, mientras que otras demostraron por qué México en la gimnasia no trajo medallas de Beijing.
La porra de Indios, chiquita pero picosa, recibe con rechiflas a Oswaldo. La afición lo defiende. Ya todos están en la cancha pero ¿y en dónde está Benítez?, igual que a la pretemporada, el "Chucho" llega un poquito tarde.
Paco Torres se animó para demostrar por qué Eriksson lo llamó pero el portero Blanco la desvía. Los Guerreros de poco a poco se encuentran cerca del segundo tanto y eso anima a los aficionados, que ya se estaban durmiendo por el poco futbol, además del calor húmedo.
Vuoso está a punto de que explote el júbilo por otro gol, pero se queda a centímetros. Van varios balones que pegan en las redes pero por afuera.
En una jugada que inicia de un despeje de Tano Ortiz, que Arce no deja salir, Matías mantiene y la pasa al mismo Arce que cede a Lorito, para después con ventaja Jiménez la regresa a Fernando y éste sólo tiene que elevarla por encima de Blanco. Gol y celebración a toda garganta en la tribuna, que ya hacía falta.
La porra de Indios prende fuego y manda señales de humo, como desesperados. Huelen cada vez a Primera A. Se prende la iluminación, bueno sólo dos torres. Santos entretiene la pelota pero no al público.
"Ahí viene el agua", las nubes sólo están esperando a que se acabe el juego para descargarse en el Corona. Edwin Santibáñez intentó desde el primer minuto pero no le sienta bien el Corona, busca por lo menos un tanto para su causa, pero hoy los Indios "no anotan ni con embudo".
Un choque de cabezas y no hay "carrito de las desgracias" para ayudara a los caídos. Los camilleros se la avientan a patín.
Después de que Indios estrellara su último intento de gol, Lorito recorrió más de media cancha con el balón para luego en el área rival enganchar y tocar suave para que el balón entrara despacio. Una gran jugada de Walter.
Para acabar, en un penal que fabricó Agustín Herrera el público pidió a Vuoso, el técnico se lo concedió pero el Toro la falla de nueva cuenta. El público le da confianza y está con el jugador naturalizado, que lo despide con el grito "Vuoso, Vuoso".
Al final parece que Santos recupera la confianza, aunque se impone a los Indios, que es el último de la tabla, pero por lo menos ya regresaron los goles.
