Cultura Cultura columnas editorial

Las Palabras tiene la Palabra

Juan Recaredo

Mucho gusto… ¿Cómo dijo usted que se llamaba?

No se preocupe. Si sus inconscientes padres cometieron la torpeza de ponerle por nombre Eccehomo, Matatías, Gratiniano o Egisto obligándolo a circular impunemente por el primer cuadro de la ciudad arrastrando ese horroroso apelativo, bastará con ir a un juzgado y por medio de un sencillo trámite cambiarlo por el de Alejandro, Guillermo o Marco Antonio del Ángel.

Lo único que no le garantizo mucho es lo de que el trámite sea sencillo porque ya ve que en México parece que somos especialistas en hacer complicadas todas las gestiones burocráticas. Somos muy buenos para poner piedras en el camino porque sabemos que cada obstáculo se brinca con UN billete.

El que ya está harto es mi compadre Gratiniano. Gratiniano Rodríguez. Cada vez que le preguntan cómo se llama, el por más claridad que le ponga al pronunciar su nombre, infaliblemente cuando lo dice el interlocutor pregunta ¿CÓMO?… ¿Podría repetírmelo por favor? Y es que él le había visto cara de llamarse José Luis y le va saliendo con Gratiniano.

Algo parecido debe sucederle a Abedenago, a Pompilio y a Eleusipo. Con el agravante de que a Pompilio, cuando se presenta todo el mundo se fija a ver cómo anda de sus protuberancias traseras y a Expedito se le acercan a ver si no trae aliento alcohólico. Pero no, Expedito es aquel que está pronto a luchar, el que está libre de todo obstáculo… Eso quiere decir Expedito y no le quite usted el diminutivo porque entonces sí el asunto huele mal.

Imagínese cómo sería su vida –la vida de usted, estimado lector- si le hubieran puesto Protólico… o Onedollar (Todos estos nombres son tomados de casos reales. No crea usted que los estamos inventando) Hubo una persona que se llamó Onedollar y luego se quejaba porque quería cambiarse el nombre y le cobraban twenty dollars. NO es justo, se quejaba el tipo. Me quieren cambiar uno por veinte.

En una notaría de Bogotá, Colombia se recuerda mucho el caso del Señor Circuncisión Pérez que UN día se presentó a hacer la diligencia del cambio de su nombre porque ya estaba “hasta el prepucio” de las burlas y las dificultades que provocaba al momento de hacer cualquier trámite.

Está también el caso de Hércules al que no le podían asignar un diminutivo porque se prestaba a muchos albures en los que el pobre de Herculitos siempre salía perdiendo.

Ahora que, según el cantor del folclor urbano Chava Flores, llamarse Próculo ya es un descaro y luego acusa a Justiniano, Luciano y Ponciano de tener nombres “con fin maloliente”.

Estimado Don Juan.

Escríbame a “Estimado Don Juan” y plantee las dudas que tenga acerca de los usos del lenguaje. Con todo gusto trataré de aclararlas. La dirección de correo electrónico es:

donjuanrecaredo@gmail.com

Y si le interesa el tema de las palabras, le recomiendo los libros “Como dijo II”, “Cómo dijo IV”, “El Bien Decir I”, “El Bien Decir II”, “Por si las dudas” y “El Diccionario para Uso Diario”, todos con el singular estilo y el humor de mi querido compadre Ricardo Espinosa. Pídalos a libros@comodijo.net o bien al Tel 0181 8317 8659 y se los mandan hasta la puerta de su casa, en cualquier ciudad del País.

PREGUNTA DEL PÚBLICO: Jorge (así firma su mensaje) más conocido entre sus amigos como “Koki” dice: No entiendo muy bien el uso de la palabra inflamable, es decir cuando un camión lleva la leyenda “producto inflamable”, en mi lógica quiere decir que no es capaz de estallar o prender, dado la palabra IN, como decir estoy incomodo, significa NO estoy cómodo, ¿por qué es aceptado este término o es un error común?

RESPUESTA: La partícula IN tiene dos significados: Uno, que implica DENTRO DE como en INTERNO, INCENDIO, etc. El otro es el que implica LO CONTRARIO, por ejemplo INMORAL es lo contrario de MORAL o lo INCÓMODO es lo contrario de CÓMODO. .En el caso de INFLAMABLE se aplica el primer significado porque el combustible se INFLAMA, es decir, que se envuelve en llamas, por eso se dice que es INFLAMABLE y eso es lo correcto en el caso de los camiones que llevan el combustible.

Frase optimista o pesimista según por donde se le vea: Lo único bueno de la guerra es que da paso a la paz…¿Cómo dijo? ¡LAS PALABRAS TIENEN LA PALABRA!

Leer más de Cultura

Escrito en:

Comentar esta noticia -

Noticias relacionadas

Siglo Plus

+ Más leídas de Cultura

LECTURAS ANTERIORES

Fotografías más vistas

Videos más vistos semana

Clasificados

ID: 340996

elsiglo.mx