MUCHOS EN UN SOLO GRUPO, SON LOS COLECTIVOS
Gente es un sustantivo colectivo e indica grupo de personas. En el norte, más que en otros rumbos del país, tenemos la costumbre de utilizar el nombre gente como sinónimo de persona: Entonces es muy común que se diga, por ejemplo: llegaron muchas gentes, pero eso no debe ser así. Gente es un grupo de personas y no una persona en particular... Aunque debo decirle que el Diccionario de la Lengua Española en su última edición ya lo acepta así.
Parvada, por ejemplo, también lo es, (un grupo) porque se refiere a un montón ¿de qué? Pues de parvas... ¿Y eso qué es?, pregunta usted con la incertidumbre reflejándose en su cara. Parva es la mies, el cereal maduro que se cosecha y queda listo para hacer el pan. En la actualidad, la palabra parvada se usa para nombrar a un conjunto de pájaros, pero también hay quien le llama bandada.
En el caso de las abejas, el colectivo es enjambre. Cuidado, no confundir con panal. El panal es la casa que ellas mismas construyen para vivir. El enjambre es un montón de abejas juntas.
Ahora, déjeme señalar que el enjambre es siempre de abejas, entonces decir enjambre de abejas es pleonasmo o redundancia porque con decir enjambre basta. NO hay enjambres de moscas ni de zancudos.
Algo similar sucede con el cardumen que siempre se refiere a peces. Por eso decir cardumen de peces sería redundancia totalmente redundante. ¿Por qué? Pues porque el cardumen siempre es de peces.
La jauría es de perros, pero en ese caso sí es necesario porque el colectivo puede hacerse extensivo a otros animales que son parientes cercanos de los perros como los lobos y coyotes.
O sea, que puede haber jauría de perros, de lobos o de coyotes. ¿Y por qué a la jauría se le llama así? La explicación suena algo infantil pero así es. Se le llama jauría a un conjunto de animales que hacen jau jau, es decir que ladran o aúllan, y los que hacen eso son los cánidos como los que ya dije,
Las reses, cabras, caballos y demás animales llamados “de corral” forman el colectivo ganado. Un rebaño puede estar integrado por elefantes, ovejas, carneros y cabras, mientras que la manada puede ser de burros, caballos o mulas... o tal vez también de elefantes.
Los nombres colectivos pueden referirse no sólo a personas y animales, sino también a cosas. Biblioteca, por ejemplo, es un conjunto de libros y discoteca lo es de discos. La hemeroteca es de periódicos y modernamente se ha acuñado la palabra videoteca que es el lugar donde se guardan las cintas de video.
ESCRÍBALE A DON
JUAN RECAREDO:
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PREGUNTA DEL PÚBLICO: Decir “ahorita” es un barbarismo, pero ¿por qué? me pregunta Eliseo Sánchez, de Saltillo.
RESPUESTA: Es que ahora es un adverbio y el adverbio es invariable. ¿Qué quiere decir eso? Pues que no tiene género, número, tiempo o modo. Tampoco se deben usar los adverbios en diminutivo o aumentativo. Por ejemplo un sustantivo sí es variable. Puede ser perro, perros, perrito, perrote, etc. Y ahora siempre es ahora. Sin embargo algunos adverbios nosotros los mexicanos los usamos en diminutivo: Prontito, cerquita, ahorita y despuecito, por ejemplo.
UNA RECOMENDACIÓN YA PARA IRNOS: Si un día te despiertas y no tienes dolores, preocúpate. Lo más probable es que estés muerto... ¿Cómo dijo? ¡LAS PALABRAS TIENEN LA PALABRA!