NO RECORDABA. Gerardo decía que de pronto el carro tenía los golpes.
Durante tres años, Armida Ornelas le confió a un joven su auto tipo Pointer para que se lo lavara.
El sábado por la noche, ella volvió a su casa, le dio las llaves a Gerardo Pérez Díaz para que lavara el carro. Él estaba ebrio y agarró el auto para irse a dar una vuelta.
Se estampó
Gerardo iba en sentido contrario por la avenida Allende de Lerdo, al llegar a la Ortiz de Zárate, chocó el Ponter. Los daños materiales fueron de 2 mil pesos en el Pointer.
