Un juez federal ha ordenado la libertad de cinco argelinos sospechosos de terrorismo encarcelados sin cargos desde hace casi siete años en Guantánamo.
En el primer fallo de una corte civil para sospechosos de terrorismo que apelan su detención, el juez federal Richard J. Leon dijo que no se podía mantener presos a los cinco indefinidamente como combatientes enemigos.
El magistrado dijo que las autoridades militares pueden mantener detenido a un sexto argelino, Belkacem Bensayah, quien fue capturado con los otros cinco.
Uno de los beneficiados por el fallo es Lakhdar Boumediene, cuyo caso ante la Corte Suprema obtuvo para los presos de Guantánamo el derecho de apelar su detención.
El gobierno ha acusado a los seis sujetos de planear un viaje a Afganistán para unirse a la red terrorista Al Qaeda.
Sus abogados dijeron que no hay evidencia alguna de que hubieran terminado en un campo de batalla o le hubieran presentado amenaza alguna a Estados Unidos.
El gobierno inicialmente detuvo a Boumediene y los otros cinco bajo sospecha de planear el bombardeo de la embajada estadounidense en Sarajevo en octubre del 2001. El grupo fue transferido a Guantánamo en enero del 2002.
El Departamento de Justicia desde entonces ha retirado las acusaciones de atentar contra la embajada, pero mantienen que los seis fueron detenidos antes de poder sumarse a las acciones terroristas contra Estados Unidos y sus aliados.
El gobierno de George W. Bush dijo que tenía derecho de actuar ante las amenazas que podrían presentar los argelinos, especialmente en los meses posteriores a los atentados terroristas del 11 de septiembre en Nueva York y Washington el 11 de septiembre del 2001.
