El periódico Free Press, de Detroit, publicó extractos de los apasionados mensajes de texto enviados por Kilpatrick a Beatty. (AP)
El alcalde de Detroit (Michigan), Kwame Kilpatrick, y su ex jefa de gabinete, Crhristine Beatty, obtuvieron hoy su libertad bajo fianza, luego de declararse inocentes de perjurio, cargo que enfrentan por negar bajo juramento un romance.
Por separado, pero con el mismo equipo de abogados, ambos comparecieron este martes ante el juez Steve Lockhart.
De acuerdo con los abogados, la pareja rechazó los ocho cargos que el lunes fueron presentados en su contra por la fiscal Kym Worthy, entre ellos los de perjurio, asociación delictuosa, obstrucción de la justicia y mala conducta en el trabajo.
El juez Lockhart emitió en contra de los acusados una orden de prohibición de salida del estado de Michigan mientras el caso siga abierto.
Los abogados de la pareja se limitaron a reiterar que sus clientes serán exonerados de los cargos.
El alcalde, de origen afroamericano, y su ex ayudante, ambos de 37 años, están acusados de negar su relación amorosa durante un juicio relacionado con el despido presuntamente injustificado de dos policías de la ciudad.
En ese proceso, los dos guardias de seguridad argumentaron que su despido derivó de las investigaciones sobre contra el alcalde, a quien se acusaba de usar a los servicios de seguridad como escoltas para encubrir sus relaciones extramatrimoniales.
En un esfuerzo por evitar el escándalo, el alcalde, casado y con tres hijos, accedió a pagar 8.4 millones de dólares a los dos policías, así como a un tercer funcionario demandante.
Pero en enero último, el periódico Free Press, de Detroit, publicó extractos de los apasionados mensajes de texto enviados por Kilpatrick a Beatty.
"He estado soñando todos los días con tenerte para mí tres días, relajados, riendo, platicando, durmiendo y haciendo el amor", escribió Kilpatrick el 16 de octubre del 2002 a su amante.
Esos mensajes contradijeron los testimonios del alcalde y su ayudante, quienes presuntamente mintieron bajo juramento, lo que ahora tiene al joven alcalde al punto de la desgracia política.
Sólo por perjurio, la pena estimada es de 15 años de prisión, pero también le esperan al alcalde las acusaciones por obstruir la justicia y mantener una conducta inapropiada en su responsabilidad pública.
Beatty estaba casada en el tiempo en que se acreditó el intercambio e mensajes amorosos, tiene dos hijos y renunció a su función como jefe de personal en febrero pasado.
La fiscal Worthy dijo que su equipo ha revisado más de 40 mil páginas de documentos desde que empezó la investigación el 31 de enero, un día después de que el periódico publicara algunos de los mensajes entre la pareja.